Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Isaías 26:18 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

18 Concebimos, nos retorcimos, ¡como si diéramos a luz viento! No trajimos salvación al país, no le nacieron habitantes al orbe.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

18 Concebimos, tuvimos dolores de parto, dimos a luz viento; ninguna liberación hicimos en la tierra, ni cayeron los moradores del mundo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

18 También nosotros nos retorcemos de agonía, pero nuestros sufrimientos no resultan en nada. No le hemos dado salvación a la tierra, ni le trajimos vida al mundo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

18 Hemos concebido, tuvimos dolores como si diéramos a luz, pero ¡puro aire!; no hemos traído al país la salvación, y no se ven los pioneros de un mundo nuevo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

18 Concebimos, nos retorcimos, Pero dimos a luz viento; No trajimos salvación° a la tierra, Ni le nacieron habitantes al mundo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

18 Concebimos, tuvimos dolores de parto, pero fue como si diéramos a luz viento. Ninguna liberación hicimos en la tierra, ni cayeron los moradores del mundo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Isaías 26:18
12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Dolores de parto le sobrevienen, pero es el parto de un hijo insensato: cuando llega la hora no sabe ponerse en la abertura del seno materno.


con tu mano, Señor, de los mortales: de los muertos del mundo, con su parte en la vida, cuyo vientre se llena en tus reservas: ahítanse los hijos, y dejan lo restante a sus pequeños.


No hay nadie que acuse con justicia, nadie que juzgue con sinceridad; se confía en la nada, se dice lo vano, se concibe la pena, se da a luz la maldad.


Y le dijeron: 'Así habla Ezequías: hoy es día de angustia, de castigo y de oprobio, porque los hijos han llegado al cuello del útero, pero no hay fuerzas para el alumbramiento.


Y le dijeron: 'Así habla Ezequías: hoy es día de angustia, de castigo y de oprobio, porque han llegado los hijos al cuello del útero, pero no hay fuerzas para el alumbramiento.


Concebís hojas y parís rastrojos, mi soplo es fuego que os devora.


Pero el ejército dijo a Saúl: '¿Va a morir Jonatán, cuando ha sido él quien consiguió esta gran victoria en Israel? ¡De ninguna manera! Por vida de Yahveh, que no ha de caer en tierra un solo cabello de su cabeza, porque con la ayuda de Dios ha actuado hoy así'. De este modo, el ejército libró a Jonatán de la muerte.


Pero Saúl replicó: 'Nadie morirá en este día, puesto que Yahveh ha salvado hoy a Israel'.


Sabemos que somos de Dios, y que el mundo entero está sometido al Maligno.


A vosotros no os puede odiar el mundo; pero a mí me odia, porque el testimonio que doy contra él es de que sus obras son malas.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម