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Hechos 2:22 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

22 Oíd, israelitas, estas palabras: a Jesús de Nazaret, hombre acreditado por Dios ante vosotros con milagros, prodigios y señales que por él realizó Dios entre vosotros, como bien sabéis;

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Biblia Reina Valera 1960

22 Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él, como vosotros mismos sabéis;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

22 »Pueblo de Israel, ¡escucha! Dios públicamente aprobó a Jesús de Nazaret al hacer milagros poderosos, maravillas y señales por medio de él, como ustedes bien saben;

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Biblia Católica (Latinoamericana)

22 Israelitas, escuchen mis palabras: Dios acreditó entre ustedes a Jesús de Nazaret. Hizo que realizara entre ustedes milagros, prodigios y señales que ya conocen.

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La Biblia Textual 3a Edicion

22 Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con maravillas° y prodigios y señales milagrosas, que Dios hizo por medio de Él entre vosotros, como también vosotros sabéis;

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

22 Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús Nazareno, varón aprobado de Dios entre vosotros con milagros y prodigios, y señales que Dios hizo en medio de vosotros por medio de Él, como también vosotros sabéis.

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Hechos 2:22
42 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Éste fue de noche a ver a Jesús y le dijo: ' Rabbí, nosotros lo sabemos: tú has venido de parte de Dios en calidad de maestro. Porque nadie puede hacer esas señales que tú haces, si Dios no está con él'.


sabed todos vosotros y todo el pueblo de Israel que este hombre se presenta ante vosotros sano en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de entre los muertos.


Pero si yo expulso los demonios por el dedo de Dios, es que el reino de Dios ha llegado a vosotros.


Pero si yo expulso los demonios en virtud del Espíritu de Dios, es que el reino de Dios ha llegado a vosotros.


Al ver esto, la multitud quedó sobrecogida de temor y glorificaron a Dios por haber dado tal poder a los hombres.


y el mismo Dios abonaba su testimonio con señales prodigios y con toda suerte de milagros y dones de Espíritu Santo, repartidos según su voluntad.


Ante vosotros mismos se cumplieron las señales propias del apóstol: la constancia a toda prueba, las señales, los prodigios, los milagros.


Sabe de estas cosas el rey, a quien por ello hablo confiadamente, pues no puedo creer que nada de esto ignore, ya que no ha sucedido en ningún rincón.


Por lo que a mí respecta, pensé que era mi deber hacer todo lo posible contra el nombre de Jesús de Nazaret.


Hemos descubierto que éste es un hombre pestífero y promotor de tumultos entre todos los judíos dispersos por el mundo, como cabecilla de la secta de los nazarenos.


Yo respondí: '¿Quién eres tú, Señor?'. Y me dijo: 'Yo soy Jesús de Nazaret, a quien tú persigues'.


gritando: 'Hombres de Israel, ayudadnos. Éste es el hombre que anda enseñando a todos y en todas partes contra el pueblo y la ley y este lugar, hasta el extremo de haber introducido griegos en el templo y profanado este lugar santo'.


Llegados y congregada la iglesia, refirieron lo que Dios había hecho con ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe.


Se levantó Pablo y, reclamando atención con la mano, dijo: 'Israelitas y los que teméis a Dios, escuchad:


porque le hemos oído decir que ese Jesús de Nazaret destruirá este lugar y cambiará las costumbres que nos transmitió Moisés'.


y dijo: 'Israelitas, pensad bien qué vais a hacer con estos hombres.


Al ver esto Pedro, se dirigió a la muchedumbre con estas palabras: 'Israelitas, ¿por qué os admiráis de esto, o por qué nos estáis mirando como si por nuestras propias fuerzas o por nuestra piedad hubiéramos hecho andar a este hombre?


Pilato escribió también un letrero y lo puso encima de la cruz. En él estaba escrito: JESÚS EL NAZARENO, EL REY DE LOS JUDÍOS.


Si yo no hubiera hecho entre ellos obras que ningún otro ha realizado no serían culpables; ahora, aunque las han visto, nos han odiado tanto a mí como a mi Padre.


La gente que había estado con él cuando llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos daba testimonio a su favor.


Los pontífices y los fariseos reunieron el sanedrín y decían: '¿Qué hacemos, en vista de que este hombre realiza tantas señales?


Si no realizo las obras de mi Padre, no me creáis;


Si éste no viniera de parte de Dios, no habría podido hacer nada'.


Entre el pueblo, hubo muchos que creyeron en él y que decían: 'Cuando llegue el Cristo, ¿acaso hará más señales de las que ha hecho éste?'.


No trabajéis por conseguir el alimento perecedero, sino el que permanece para vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre, porque éste es el que el Padre, Dios, ha marcado con su sello'.


Cuando vieron los hombres la señal que Jesús había realizado, decían: 'Éste es, sin duda, el profeta que iba a venir al mundo'.


'Yo tengo un testimonio que es superior al de Juan: las obras que el Padre me ha encomendado llevar a término, estas mismas obras que yo estoy haciendo, dan testimonio en favor mío de que el Padre me ha enviado.


Entonces le dijo Jesús: 'Como no veáis señales y prodigios, nunca jamás creeréis'.


Felipe se encuentra con Natanael y le dice: 'Hemos encontrado a aquel de quien escribieron Moisés, en la ley, y los profetas: a Jesús, hijo de José, el de Nazaret'.


Y uno de ellos, llamado Cleofás, le respondió: '¿Pero eres tú el único forastero en Jerusalén que no sabe lo sucedido allí en estos días?'.


y se fue a vivir a una ciudad llamada Nazaret. Se cumplió así lo anunciado por los profetas: que sería llamado Nazareno.


No temas, gusanillo de Jacob, larva de Israel. 'Yo te ayudo', dice Yahveh; tu redentor es el Santo de Israel.


Haré prodigios arriba en el cielo, y señales abajo en la tierra: sangre y fuego y vapor de humo;


El temor se apoderaba de todos, porque los apóstoles realizaban muchos prodigios y señales.


Pedro le dijo: 'Ni plata ni oro tengo; pero lo que tengo, eso te doy: en el nombre de Jesucristo de Nazaret, anda'.


Le contestaron que estaba pasando por allí Jesús de Nazaret.


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