Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Hebreos 13:6 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Y así, nosotros podemos confiadamente decir: El Señor es quien me ayuda; nada temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

6 de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Así que podemos decir con toda confianza: «El Señor es quien me ayuda, por tanto, no temeré. ¿Qué me puede hacer un simple mortal?».

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Y nosotros hemos de responder confiados: El Señor es mi socorro, no temeré. ¿Qué pueden hacerme los hombres?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

6 De manera que podemos decir osadamente: El Señor es mi ayudador, no temeré. ¿Qué me puede hacer el hombre?°

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 De manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; y: No temeré lo que me pueda hacer el hombre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Hebreos 13:6
29 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

no temas, que yo estoy contigo; no te asustes, que yo soy tu Dios. Te fortalezco y te ayudo, te sostengo con mi diestra salvadora.


¿Qué más decir? Si Dios está por nosotros, ¿quién contra nosotros?


Nuestro socorro está en el nombre del Señor, hacedor de los cielos y la tierra.


Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, para que obtengamos misericordia y hallemos gracia para ser socorridos en el momento oportuno.


El día en que temiere, me confiaré a ti.


No tengáis miedo a los que matan el cuerpo; que al alma no pueden matarla. Temed más bien a quien tiene poder para hacer que perezcan cuerpo y alma en la gehenna.


Escucha tú mis ruegos, presta oído a las palabras de mi boca.


Nuestra vida está en espera del Señor, él, nuestro socorro y nuestro escudo.


En mi lecho te recuerdo y en las vigilias pienso en ti,


Si no fuera el Señor a socorrerme por poco ya estaría postrado en el silencio.


Que de ti puedan gozarse y alegrarse todos los que te buscan, y puedan decir siempre quienes aman tu socorro: '¡Grande es el Señor!'.


Después de estos sucesos, Yahveh dirigió la palabra a Abrán en una visión, diciéndole: 'No temas, Abrán. Yo soy tu escudo; tu recompensa será muy grande'.


en el cual tenemos la confiada libertad y el acceso seguro por medio de la fe en él.


¡Dichoso tú, Israel! ¿Quién como tú, pueblo salvado por Yahveh, tu escudo protector, y cuya espada es tu exaltación? Tus enemigos simularán someterse ante ti, pero tú hollarás sus espaldas'.


No temas, gusanillo de Jacob, larva de Israel. 'Yo te ayudo', dice Yahveh; tu redentor es el Santo de Israel.


No me ocultes tu rostro ni arrojes a tu siervo con desdén, tú, que eres mi socorro. No me olvides ni abandones, oh Dios, mi salvador.


No confiéis en los príncipes ni en los humanos que no tienen el socorro.


No hay nadie como el Dios de Yesurún: que sobre los cielos cabalga para ir en tu ayuda, y sobre las nubes, en su majestad.


y el otro Eliezer, porque 'el Dios de mi padre vino en mi ayuda' y me libró de la espada del Faraón.


Así, pues, hermanos, tenemos entera confianza para entrar en el 'lugar santísimo' en virtud de la sangre de Jesús:


Y le dijo: 'No temas; que la mano de Saúl, mi padre, no te ha de sorprender. Tú reinarás sobre Israel, y yo seré tu segundo. Incluso mi padre Saúl se da cuenta de esto'.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម