Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Ezequiel 7:2 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 'Hijo de hombre, di: así dice el Señor Yahveh al país de Israel: 'El fin ha llegado, ha llegado el fin a los cuatro confines de la tierra.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

2 Tú, hijo de hombre, así ha dicho Jehová el Señor a la tierra de Israel: El fin, el fin viene sobre los cuatro extremos de la tierra.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 «Hijo de hombre, esto dice el Señor Soberano a Israel: »¡Ya llegó el fin! Dondequiera que mires —al oriente, al occidente, al norte o al sur— tu tierra está acabada.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Hijo de hombre, así habla Yavé a la tierra de Israel: ¡Es el fin! ¡Llegó el final a los cuatro rincones del país!

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Tú, hijo de hombre, di: Así dice Adonay YHVH a la tierra de Israel: ¡El fin llega! ¡El fin llega a los cuatro extremos de la tierra!

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Y tú, hijo de hombre di: Así dice el Señor Jehová a la tierra de Israel: El fin, el fin viene sobre los cuatro extremos de la tierra.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Ezequiel 7:2
28 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Y me preguntó: '¿Qué ves, Amós?'. 'Una cesta de fruta madura', respondí. Yahveh me dijo: 'Mi pueblo Israel está maduro, no le perdonaré ya más.


El final de todo está cerca. Sed, pues, sensatos y velad en la oración.


Cambiaré en llanto vuestras fiestas, y todos vuestros cantos en lamento; pondré un saco en todas las cinturas, y en todas las cabezas tonsura; haré que haya duelo como por el hijo único, y su fin será como día de amargura.


Ahora el fin te ha llegado, porque desencadenaré mi ira contra ti, te juzgaré según tu conducta y haré recaer sobre ti todas tus abominaciones.


Mientras yo estaba profetizando, cayó muerto Pelatías, hijo de Benaías. Yo entonces caí de bruces y a grandes voces grité diciendo: '¡Ay, Señor Yahveh! ¿Vas a exterminar lo que queda de Israel?'.


Sade. Espiaban nuestros pasos, nos prohibían andar por nuestras plazas. Se acercaba nuestro fin, se cumplían nuestros días. Sí; nuestro fin ha llegado.


Habéis de oír fragores de batallas y noticias de guerras. ¡Cuidado! No os alarméis. Porque eso tiene que suceder, pero todavía no es el fin.


Me llevó en visiones divinas al país de Israel y me situó sobre un monte muy alto, encima del cual había, por la parte del mediodía, una construcción a manera de ciudad.


'Hijo de hombre, vuelve tu rostro en dirección al sur, vaticina hacia el mediodía, profetiza contra el bosque de la región del Negueb.


'Hijo de hombre, ¿qué es este proverbio que tenéis acerca del territorio de Israel: 'Se prolongan los días y toda visión ha desaparecido?'.


Tet. . Su impureza impregna sus vestidos. No se acordó de su fin; ha caído de forma inesperada, sin tener quien la consuele. Mira, Yahveh, mi aflicción, y cómo se crece mi enemigo.


¡Tú, la que habitas junto a aguas caudalosas, rica en tesoros! Tu fin ha llegado, el plazo del corte de tu vida.


los profetas profetizan con mentira, los sacerdotes gobiernan por su cuenta, y mi pueblo así lo quiere. Pero ¿qué haréis cuando llegue el fin?


derribó los altares, demolió las aserás, hizo pedazos los ídolos y los redujo a polvo, destrozó todos los obeliscos solares en todo el país de Israel, y después regresó a Jerusalén.


Y ha dicho: les ocultaré mi rostro, veré cuál es su fin. Porque raza pervertida son ellos, hijos que no tienen lealtad.


Dijo entonces Dios a Noé: 'He determinado acabar con todos, ya que por su culpa la tierra está llena de violencia, y voy a exterminarlos a ellos con la tierra.


Después vi a cuatro ángeles de pie sobre los cuatro confines de la tierra, que retenían los cuatro vientos de la tierra para que no soplara viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.


y saldrá para seducir a los pueblos que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, para congregarlos para la guerra, tan numerosos como la arena del mar.


Dijiste: 'Siempre seré soberana, por siempre jamás'. No consideraste estas cosas, no recordaste su desenlace.


¿Hasta cuándo hará duelo el país y estará la hierba de todo el campo reseca? Por la maldad de sus habitantes, bestias y aves desaparecieron. Pero dicen ellos: 'No ve nuestros caminos'.


Me fue dirigida la palabra de Yahveh en estos términos:


Todo mortal verá que yo, Yahveh, la he encendido; no se apagará'.


Señala un camino para que la espada venga a Rabá de los amonitas, y el otro a Judá y a Jerusalén, la fortificada.


'Porque has tenido un odio secular contra los israelitas y los entregaste a la espada cuando ocurrió su desastre, en el momento de su último castigo,


'¡Ay! ¡Ay de ese día! Porque está cerca el día de Yahveh: viene como devastación de Sadday.'


'Hijo de hombre, vuelve tu rostro hacia Jerusalén, vaticina hacia los santuarios, profetiza contra el país de Israel.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម