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Ezequiel 17:17 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Ni con un gran ejército ni con tropa numerosa le ayudará el Faraón cuando se levanten terraplenes y se construyan baluartes para exterminar muchas vidas.

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Biblia Reina Valera 1960

17 Y ni con gran ejército ni con mucha compañía hará Faraón nada por él en la batalla, cuando se levanten vallados y se edifiquen torres para cortar muchas vidas.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

17 Ni el faraón con su poderoso ejército podrá ayudar a Israel cuando el rey de Babilonia vuelva a sitiar a Jerusalén y mate a mucha gente.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Faraón no le enviará un gran contingente, con mucha gente, cuando se levanten terraplenes y torres para aplastar a los defensores.

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La Biblia Textual 3a Edicion

17 Faraón no lo salvará en la guerra ni con gran ejército ni con mucha tropa, Cuando levanten murallas de asedio y construyan torres para matar a tanta gente.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

17 Y no con grande ejército, ni con mucha compañía hará por él Faraón en la batalla, cuando funden baluarte y edifiquen bastiones para cortar muchas vidas.

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Ezequiel 17:17
10 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

así dice Yahveh, Dios de Israel: de este modo hablaréis al rey de Judá, que os ha enviado a mí para consultarme: mirad: el ejército del Faraón que ha salido en vuestra ayuda se volverá a su país de Egipto;


Ponle sitio, construye un baluarte junto a ella, levanta junto a ella un terraplén, pon junto a ella campamentos y coloca junto a ella arietes todo alrededor.'


En realidad, tú confías en el apoyo de una caña rota, en Egipto, que pincha y traspasa la mano de quien se apoya en ella. Así es el Faraón rey de Egipto, para todos los que confían en él.


Entre tanto, el ejército del Faraón había salido de Egipto. Cuando los caldeos que sitiaban a Jerusalén oyeron la noticia, se retiraron de Jerusalén.


Ain. Todavía se consumen nuestros ojos esperando en vano el socorro. Desde nuestra atalaya oteábamos a una nación incapaz de salvarnos.


Por eso, en el año noveno de su reinado, en el mes décimo, el día diez del mes, llegó Nabucodonosor, rey de Babilonia, con todo su ejército contra Jerusalén, acampó frente a ella y construyó un muro de asedio alrededor.


se traba combate contra los caldeos para que quede llena con los cadáveres de los hombres que maté a causa de mi ira y de mi furor, puesto que había ocultado mi rostro de esta ciudad a causa de toda su maldad.


Vendrá entonces el rey del norte, levantará terraplenes y tomará la ciudad fortificada. Las fuerzas del mediodía no resistirán, y ni siquiera las tropas escogidas serán capaces de resistir.'


Sólo los árboles que veas que no son frutales podrás talar y derribar, para construir con ellos ingenios de asedio contra esa ciudad que te hace la guerra, hasta que se rinda.


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