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Ezequiel 1:3 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 la palabra de Yahveh le fue dirigida a Ezequiel, hijo de Buzí, sacerdote, en el país de los caldeos, a orillas del río Quebar, y allí se dejó sentir sobre él la mano de Yahveh.

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Biblia Reina Valera 1960

3 vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

3 (El Señor le dio este mensaje al sacerdote Ezequiel, hijo de Buzi, junto al río Quebar, en la tierra de los babilonios; y él sintió que la mano del Señor se apoderó de él).

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Biblia Católica (Latinoamericana)

3 la palabra de Yavé fue dirigida al sacerdote Ezequiel, hijo de Buzi, en el país de los caldeos, a orillas del río Quebar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 el sacerdote Ezequiel ben Buzi tuvo revelación expresa de YHVH en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar. Allí estuvo sobre mí la mano de YHVH,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 la palabra de Jehová vino expresamente al sacerdote Ezequiel, hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río de Quebar; y la mano de Jehová fue allí sobre él.

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Ezequiel 1:3
23 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

La mano de Yahveh se posó allí sobre mí y me dijo: 'Levántate, sal a la llanura y allí te hablaré'.


El espíritu me elevó y me arrebató, y yo iba amargado por la excitación de mi espíritu, pues la mano de Yahveh pesaba sobre mí.


Ahora traedme un tañedor de arpa'. Y sucedió que, mientras el tañedor tañía el arpa, la mano de Yahveh se apoderó de Eliseo


La mano de Yahveh se posó sobre Elías, quien se ciñó la cintura y fue corriendo delante de Ajab hasta la entrada de Yizreel.


El año veinticinco de nuestro cautiverio, al principio del año, el día diez del mes, catorce años después de haber sido tomada la ciudad, en aquel mismo día, la mano de Yahveh se posó sobre mí y me llevó allá.


La mano de Yahveh se posó sobre mí. Yahveh me sacó fuera en espíritu y me dejó en medio de una llanura que estaba llena de huesos.


Ahora bien, la mano de Yahveh había venido sobre mí por la tarde, antes de que llegara el fugitivo, y abrió mi boca por la mañana, antes de que se presentara el fugitivo. Se me abrió la boca y ya no volví a estar mudo.


El año sexto, el día cinco del sexto mes, estando yo sentado en mi casa y los ancianos de Judá sentados en mi presencia, se posó sobre mí la mano del Señor Yahveh.


El Espíritu dice expresamente que, en los últimos tiempos, algunos desertarán de la fe y se entregarán a espíritus engañosos y enseñanzas demoníacas,


Palabra de Yahveh dirigida a Joel, hijo de Petuel.


El año treinta, el día cinco del cuarto mes, estando yo entre los deportados, junto al río Quebar, se abrieron los cielos y tuve visiones divinas.


al que le fue dirigida la palabra de Yahveh en tiempo de Josías, hijo de Amón, rey de Judá, el año trece de su reinado,


La palabra de Yahveh me fue dirigida en estos términos:


pues nunca fue proferida profecía alguna por voluntad humana, sino que los hombres hablaron de parte de Dios movidos por el Espíritu.


A la orilla de los ríos de Babel estábamos sentados y llorábamos, recordando a Sión.


Los querubines se elevaron: era el ser viviente que yo había visto junto al río Quebar.


Tenderé mi red sobre él y quedará preso en mi lazo, lo llevaré a Babilonia, al país de los caldeos; pero no lo verá y allí morirá.


La visión que yo vi era como la visión que yo había visto cuando vino a destruir la ciudad. En los detalles era como la visión que yo había visto junto al río Quebar. Y caí rostro en tierra.


El día veinticuatro del primer mes, mientras yo estaba a la orilla del gran río, es decir, del Tigris,


Vosotros decís: 'Yahveh nos ha suscitado profetas en Babilonia'.


Llegué así a los deportados en Tel Abib, que habitaban a orillas del río Quebar, donde ellos habitaban, y allí permanecí, abatido entre ellos, siete días.


Me levanté, salí a la llanura y vi que estaba allí parada la gloria de Yahveh como la gloria que yo había visto a la orilla del río Quebar. Y caí rostro en tierra.


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