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Deuteronomio 8:2 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Te acordarás de todo el camino que Yahveh, tu Dios, te ha hecho recorrer durante estos cuarenta años por el desierto, para humillarte, probarte y saber lo que encierra tu corazón, y para ver si guardabas o no sus mandamientos.

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Biblia Reina Valera 1960

2 Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Recuerda cómo el Señor tu Dios te guio por el desierto durante cuarenta años, donde te humilló y te puso a prueba para revelar tu carácter y averiguar si en verdad obedecerías sus mandatos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Acuérdate del camino que Yavé, tu Dios, te hizo recorrer en el desierto por espacio de cuarenta años. Te hizo pasar necesidad para probarte y conocer lo que había en tu corazón, si ibas o no a guardar sus mandamientos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Te acordarás de todo el camino por donde te ha traído YHVH tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para humillarte y probarte, para saber lo que había en tu corazón, si guardarías o no sus mandamientos.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos.

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Deuteronomio 8:2
46 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

sabiendo que vuestra fe, sometida a prueba, produce constancia.


Así la calidad de vuestra fe, de más valor que el oro que, aun después de acrisolado por el fuego perece, se convertirá en alabanza, gloria y honor en la manifestación de Jesucristo.


el que te dio a comer en el desierto el maná, cosa que no conocieron tus padres, humillándote y poniéndote a prueba para a la postre hacerte bien,


Yahveh dijo a Moisés: 'Voy a haceros llover pan del cielo. El pueblo saldrá cada día a recoger la porción necesaria para la jornada, a fin de que yo lo ponga a prueba y vea si anda o no en mi ley.


Porque Yahveh, tu Dios, te ha bendecido en todas tus empresas, te ha conducido en tu marcha a través de este gran desierto y hace ya cuarenta años que Yahveh, tu Dios, está contigo, sin que te haya faltado nada''.


Sin embargo, cuando los jefes de Babilonia le enviaron embajadores para informarse del prodigio que había acaecido en el país, Dios lo abandonó para probarlo y hacer patente todo lo que había en su corazón.


Entonces Moisés clamó a Yahveh y Yahveh le mostró un madero que él echó en el agua. Y el agua se volvió dulce. Allí dio Yahveh al pueblo una ley y un derecho, y allí lo puso a prueba.


Humillaos ante el Señor, y él os ensalzará.


y no tenía necesidad de que le atestiguaran nada de nadie; porque él sabía lo que hay en el interior de cada uno.


Pero él da una gracia mayor. Por eso dice: Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes.


No comisteis pan ni bebisteis vino ni bebida fermentada, para que sepáis por experiencia que yo soy Yahveh, vuestro Dios.


Os digo que éste descendió a su casa justificado, y aquél no; porque todo el que se ensalza será humillado, pero el que se humilla será ensalzado'.


Yo os saqué de la tierra de Egipto y os conduje por el desierto durante cuarenta años para que ocuparais el país del amorreo.


La altivez del hombre será doblegada, la altanería de los humanos será abatida, y sólo Yahveh será ensalzado en aquel día.


La plata se acrisola y el oro se depura; pero es Yahveh quien sondea los corazones.


Al que guió a su pueblo en el desierto, pues su amor es eterno,


Nuestros padres en Egipto no prestaron atención a tus portentos ni tuvieron presentes tus favores incontables: se rebelaron en el paso del mar Rojo.


'Aligeré la carga de sus espaldas, sus manos se libraron de la espuerta'.


Yo me digo: 'Esto es lo que me apena, que ha cambiado la diestra del Altísimo'.


para apartar al hombre de la maldad y defenderlo contra el orgullo,


Al verse en tales angustias, trató de aplacar a Yahveh, su Dios, y se humilló profundamente en presencia del Dios de sus padres.


diciéndote: 'Vayamos tras otros dioses que tú no has conocido y les rendiremos culto', aunque la señal o el prodigio anunciado se verifique,


no les temas; acuérdate de lo que Yahveh, tu Dios, hizo al Faraón y a todo Egipto:


que os precedía en la marcha buscándoos un lugar donde acampar, como fuego durante la noche, para que pudierais ver el camino que habíais de seguir, y como nube durante el día.


En el año cuarenta, el undécimo mes, el primer día del mes, habló Moisés a los israelitas según todo lo que le había mandado Yahveh decirles.


Después de estos hechos, quiso Dios probar a Abrahán y le dijo: 'Abrahán'. Contestó Abrahán: 'Aquí estoy'.


A sus hijos los mataré sin remisión, y conocerán todas las Iglesias que soy yo quien escruta los corazones y las entrañas. Yo os daré a cada uno de vosotros según sus obras.


Su oración, y cómo fue atendido, todos sus pecados y prevaricaciones, los sitios en que construyó los lugares altos y colocó las aserás y los ídolos, antes de haberse humillado, están consignados en los relatos de los videntes.


Los israelitas comieron el maná por espacio de cuarenta años, hasta su llegada a país habitado; comieron el maná hasta su llegada a los confines del país de Canaán.


Respondió Moisés al pueblo: 'No temáis, que Dios ha venido para poneros a prueba y para que tengáis ante vuestros ojos su temor y no pequéis'.


vuestros hijos serán pastores en el desierto durante cuarenta años y cargarán con el peso de vuestras infidelidades, hasta que vuestros cadáveres desaparezcan en el desierto.


para probar con ellos a Israel y ver si guardan o no los caminos de Yahveh, caminando por ellos como caminaron sus padres'.


Sirvieron de prueba a Israel para saber si obedecían a los mandatos de Yahveh, los que había impuesto a sus antepasados por medio de Moisés.


ni aun entonces, por tu gran misericordia, los desamparaste en el desierto: no se apartó de ellos la columna de nube por el día, para guiarlos en el camino, ni la de fuego por la noche, para alumbrarles el camino que habían de seguir.


Yo soy Yahveh, vuestro Dios: proceded según mis leyes, observad mis normas y cumplidlas.


Recuerda los días de antaño, repasa los años de edad en edad. Pregunta a tu padre, y él te contará; a tus ancianos, y ellos te hablarán.


bendice, alma mía, al Señor, y no olvides sus numerosas recompensas.


Ni siquiera preguntaron: '¿Dónde está Yahveh, que nos sacó del país de Egipto y nos condujo por el desierto, tierra esteparia y agrietada, tierra seca y tenebrosa, tierra por donde nadie pasa y donde ningún hombre mora?'.


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