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Deuteronomio 10:12 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Y ahora, Israel, ¿qué es lo que te pide Yahveh, tu Dios, sino que temas a Yahveh, tu Dios, sigas todos sus caminos, ames y sirvas a Yahveh, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma,

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Biblia Reina Valera 1960

12 Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

12 »Y ahora, Israel, ¿qué requiere el Señor tu Dios de ti? Solo requiere que temas al Señor tu Dios, que vivas de la manera que le agrada y que lo ames y lo sirvas con todo tu corazón y con toda tu alma.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Ahora, pues, Israel, ¿qué es lo que pide Yavé, tu Dios, sino que temas a Yavé, tu Dios, que sigas todos sus caminos y que lo ames y lo sirvas con todo tu corazón y con toda tu alma?

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La Biblia Textual 3a Edicion

12 Y ahora Israel, ¿qué te pide YHVH tu Dios, sino que temas a YHVH tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a YHVH tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma;

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Deuteronomio 10:12
55 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Amarás a Yahveh, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.


'Se te ha revelado, hombre, lo que es bueno, lo que Yahveh reclama en ti: tan sólo practicar la justicia, amar la lealtad y ser humilde ante tu Dios.'


Y él respondió: ' Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente, y a tu prójimo como a ti mismo'.


Seguid en todo el camino que Yahveh, vuestro Dios, os ha señalado, para que viváis y seáis felices y prolonguéis vuestros días en la tierra que vais a ocupar.


Si obedecéis fielmente los mandamientos que hoy os prescribo yo, si amáis a Yahveh, vuestro Dios, y le servís con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma,


Él le respondió: 'Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente.


Sí; yo daré entonces a los pueblos labios puros, para que todos invoquen el nombre de Yahveh y le sirvan con idéntico esfuerzo.


Tet. Saboread y veréis cuán bueno es el Señor: dichosos los que en él buscan abrigo.


Desde allí buscarás a Yahveh, tu Dios, y lo hallarás si lo buscas con todo tu corazón y con toda tu alma.


Por lo tanto, al recibir un reino resistente a toda sacudida, mantengamos esta gracia y, por medio de ella, demos a Dios el culto que le agrada, con un religioso temor,


para que obren según mis leyes, guarden mis normas y las practiquen y así sean mi pueblo y yo seré su Dios.


El Señor es el guardián del que lo ama, mas también el que extermina a los malvados.


Canto gradual. Dichosos los que temen al Señor y van por sus caminos.


Entonces los arrojé en su propia obstinación, que caminaran según sus caprichos.


Mi único encargo es que os preocupéis de poner por obra los mandatos y la ley que Moisés, siervo de Yahveh, os ordenó: que améis a Yahveh, vuestro Dios, que sigáis todos sus caminos y guardéis sus mandamientos, que os mantengáis unidos a él y le sirváis de todo corazón y con toda vuestra alma'.


amando a Yahveh, tu Dios, escuchando su voz y allegándote a él, porque en eso está tu vida y la prolongación de tus días, para que habites sobre la tierra que Yahveh juró dar a tus padres, a Abrahán, a Isaac y a Jacob'.


Lo que yo te mando hoy es que ames a Yahveh, tu Dios, que sigas sus caminos, que guardes sus mandamientos, sus preceptos y sus normas, para que vivas y te multipliques, y Yahveh, tu Dios, te bendiga en el país en cuya posesión vas a entrar.


¿Y quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?


No améis al mundo ni lo que hay en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él;


Sabemos, además, que en todas las cosas interviene Dios para el bien de quienes le aman, de quienes son llamados según su designio.


Pero ¡ay de vosotros, fariseos, que os preocupáis por el diezmo de la menta, de la ruda y de toda clase de hortalizas, y faltáis a la justicia y al amor de Dios! Esto es lo que había que practicar, sin omitir aquello.


Si ellos escuchan y son dóciles, acaban sus días con felicidad y sus años llenos de dicha.


A Yahveh, tu Dios, temerás, a Él darás culto y en su nombre jurarás.


La Iglesia, mientras tanto, gozaba de paz en toda Judea, Galilea y Samaría, se edificaba y caminaba en el temor del Señor y crecía con la consolación del Espíritu Santo.


Porque Dios, a quien doy culto en mi espíritu anunciando el evangelio de su Hijo, me es testigo de que os recuerdo incensantemente


Del director. Del siervo de Yahveh, de David, que recitó ante Yahveh las palabras de este canto, el día en que Yahveh le libró del poder de todos sus enemigos y de la mano de Saúl.


La finalidad de esta instrucción es el amor, que procede de un corazón puro, de una conciencia sana y de una fe sincera.


Serviréis a Yahveh, vuestro Dios. Él bendecirá tu pan y tu agua, y alejará de ti la enfermedad.


a fin de que temas a Yahveh, tu Dios, tú, tu hijo y el hijo de tu hijo, guardando todos los días de tu vida todos sus preceptos y mandamientos que yo te prescribo, y así prolongues tus días.


Entonces Yahveh nos mandó que guardáramos todos estos preceptos y temiéramos a Yahveh, nuestro Dios, para que fuéramos siempre felices y nos conserve la vida, como hasta el presente.


Me dijo Yahveh: 'Anda, inicia de nuevo la marcha a la cabeza del pueblo, para que lleguen a tomar posesión del país que juré dar a sus padres'.


y guardes los mandamientos de Yahveh y sus preceptos que hoy te prescribo yo para bien tuyo?


Ama a Yahveh, tu Dios, y guarda siempre lo que él prescribe que se guarde: sus preceptos, sus normas y sus mandamientos.


Ahora, pues, temed a Yahveh y servidle con integridad y lealtad. Apartaos de los dioses a los que sirvieron vuestros antepasados al otro lado del río y en Egipto, y servid a Yahveh.


Salomón se mostraba amante de Yahveh y seguía las normas de su padre David, aunque también ofrecía sacrificios y quemaba incienso en los lugares altos.


dichosos quienes observan sus avisos y lo buscan con todo el corazón,


Fin del discurso. Una vez oído todo, teme a Dios y guarda sus mandamientos: eso es lo que al hombre corresponde.


¡Ojalá que su corazón estuviera siempre dispuesto a temerme y a guardar todos mis mandamientos, a fin de que fuesen eternamente felices, ellos y sus hijos!


Yahveh, tu Dios, te manda hoy que pongas en práctica estos preceptos y estas normas; los guardarás y los pondrás en práctica con todo tu corazón y con toda tu alma.


Escucharás, pues, la voz de Yahveh, tu Dios, y pondrás en práctica sus mandamientos y preceptos que yo te prescribo hoy'.


Samuel entonces dijo al pueblo: 'No temáis. Es cierto que habéis cometido esta gran maldad; pero no os apartéis de Yahveh, sino servidle de todo corazón.


Pero Jehú no procuró andar conforme a la ley de Yahveh, Dios de Israel, con todo su corazón ni se apartó de los pecados con que Jeroboán hizo pecar a Israel.


Hizo lo que es recto a los ojos de Yahveh, enteramente como lo había hecho David, su padre.


Se allegó a Yahveh y no se apartó de él; guardó los preceptos que Yahveh había ordenado a Moisés.


Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre y sírvele con corazón perfecto y ánimo generoso, porque Yahveh sondea todos los corazones y penetra la índole de todos los pensamientos. Si lo buscas, él se dejará hallar por ti; pero si lo abandonas, te rechazará para siempre.


Y convinieron en hacer el pacto de buscar a Yahveh, Dios de sus padres, con todo su corazón y toda su alma,


Si tan sólo mi pueblo me escuchara, si quisiera Israel marchar por mis caminos,


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