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2 Reyes 22:10 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Luego, el secretario Safán anunció al rey: 'El sacerdote Jilquías me ha entregado este libro'. Y Safán lo leyó delante del rey.

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Biblia Reina Valera 1960

10 Asimismo el escriba Safán declaró al rey, diciendo: El sacerdote Hilcías me ha dado un libro. Y lo leyó Safán delante del rey.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

10 Safán también dijo al rey: «El sacerdote Hilcías me entregó un rollo». Así que Safán se lo leyó al rey.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

10 En seguida el secretario Safán comunicó la noticia al rey: 'El sacerdote Helquías, le dijo, me pasó un libro'. Y Safán lo leyó en presencia del rey.

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La Biblia Textual 3a Edicion

10 El escriba Safán también informó al rey, diciendo: El sacerdote Hilcías me ha entregado un rollo. Y Safán lo leyó delante del rey.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

10 Y Safán, el escriba declaró al rey, diciendo: Hilcías el sacerdote me ha dado un libro. Y lo leyó Safán delante del rey.

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2 Reyes 22:10
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El rey envió entonces a Yehudí a tomar el rollo; lo tomó de la sala de Elisamá, el secretario, y Yehudí lo leyó en voz alta ante el rey y ante todos los dignatarios que estaban en torno al rey.


'Siéntate -le dijeron- y léelo en voz alta'. Baruc leyó en voz alta.


Pero irás tú, y en el día de ayuno leerás a los oídos del pueblo, en el templo de Yahveh, las palabras de Yahveh que has escrito en el rollo a mi dictado. Las leerás también a los oídos de todos los judíos que vengan de sus ciudades.


Di al rey y a la reina madre: Sentaos más abajo, porque cayó de vuestra cabeza vuestra gloriosa corona.


En aquel tiempo se leyó el libro de Moisés al pueblo, y se halló escrito en él que los amonitas y los moabitas no podrían entrar jamás en la comunidad de Dios,


Se leía diariamente, desde el día primero hasta el último, el libro de la ley de Dios. La fiesta duró siete días. Y el día octavo tuvo lugar, según costumbre, una asamblea solemne.


Luego, el secretario Safán anunció al rey: 'El sacerdote Jilquías me ha entregado este libro'. Y Safán lo leyó delante del rey.


Se presentó luego Safán, el secretario, al rey para darle cuenta de las obras y le dijo: 'Tus servidores han recogido el dinero que había en el templo y lo han puesto en manos de los capataces encargados de las obras del templo de Yahveh'.


Cuando el rey oyó las palabras del libro de la ley, rasgó sus vestiduras


Miqueas les refirió todas las palabras que había oído cuando Baruc leyó en el libro a oídos del pueblo.


Pues todas estas cosas las hizo mi mano, todas ellas son mías -dice Yahveh-. Pero en éste me fijo: en el humilde y contrito, el que tiembla a mi palabra.


Escuchad la palabra de Yahveh, los que tembláis a su palabra: dicen vuestros hermanos que os odian, que os rechazan por causa de mi nombre: ¡Muestre su gloria Yahveh y veamos vuestra alegría! Pero ellos quedarán avergonzados.


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