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2 Reyes 11:11 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Los de la guardia se apostaron, cada uno con sus armas en la mano, desde el ala derecha del templo hasta la izquierda, delante del altar y el edificio, alrededor del rey.

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Biblia Reina Valera 1960

11 Y los de la guardia se pusieron en fila, teniendo cada uno sus armas en sus manos, desde el lado derecho de la casa hasta el lado izquierdo, junto al altar y el templo, en derredor del rey.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

11 Los guardias del palacio se ubicaron alrededor del rey, con sus armas listas. Formaron una hilera desde el lado sur del templo hasta el lado norte y alrededor del altar.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

11 los guardias se pusieron en sus puestos, con su arma en la mano cada uno, desde el lado derecho de la Casa hasta el lado izquierdo, rodeando el altar y la Casa.

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La Biblia Textual 3a Edicion

11 Y los de la escolta, cada uno con sus armas en la mano, se emplazaron desde el lado sur de la Casa hasta el lado norte,° mirando hacia el altar y la Casa, alrededor del rey.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

11 Y los de la guardia se pusieron en orden, cada uno con sus armas en sus manos, desde el lado derecho del templo hasta el lado izquierdo del templo, junto al altar y el templo, alrededor del rey.

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2 Reyes 11:11
9 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

desde la sangre de Abel hasta la sangre de Zacarías, asesinado entre el altar y el santuario. Sí, os digo que se le pedirá cuenta a esta generación.


para que así caiga sobre vosotros toda la sangre inocente derramada sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el santuario y el altar.


Entre el atrio y el altar lloren los sacerdotes, ministros de Yahveh, y digan: 'Perdona, Yahveh, a tu pueblo; no entregues tu heredad al oprobio, para que se burlen de ellos las naciones. ¿Por qué habrían de decir los pueblos: dónde está su Dios?'.


Me llevó entonces al atrio interior del templo de Yahveh. Y vi que allí, a la entrada del santuario de Yahveh, entre el vestíbulo y el altar, había unos veinticinco hombres, de espaldas al santuario de Yahveh y de cara al oriente, adorando al Sol en dirección al oriente.


Luego Salomón se puso ante el altar de Yahveh, en presencia de toda la asamblea de Israel, y extendió sus manos.


Éste entregó a los jefes de las centurias las lanzas y los escudos del rey David, que estaban en el templo de Yahveh.


Formaréis un círculo alrededor del rey, cada uno con sus armas en la mano, de suerte que quien intente penetrar en las filas, será muerto. Y estaréis en todo momento junto al rey'.


Colocarás el altar de los holocaustos ante la entrada del santuario de la tienda del encuentro.


Joadá sacó entonces al hijo del rey, le puso la corona y el libro de la ley, lo proclamaron rey y lo ungieron. Luego batieron palmas y gritaron: '¡Viva el rey!'.


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