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2 Crónicas 12:12 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Por haberse humillado, se apartó de él la cólera de Yahveh y no lo destruyó totalmente, pues aún había en Judá algunas cosas buenas.

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Biblia Reina Valera 1960

12 Y cuando él se humilló, la ira de Jehová se apartó de él, para no destruirlo del todo; y también en Judá las cosas fueron bien.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

12 Como Roboam se humilló, se apartó el enojo del Señor y no lo destruyó por completo. Aún quedaban algunas cosas buenas en la tierra de Judá.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

12 La ira de Yavé se apartó de Roboam y no lo destruyó todo porque se había humillado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

12 Cuando se° humilló, la ira de YHVH se apartó de él, de manera que no lo destruyó del todo, porque aún en Judá quedaban buenas cosas.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 Y como él se humilló, la ira de Jehová se apartó de él, para no destruirlo del todo; y también en Judá las cosas fueron bien.

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2 Crónicas 12:12
12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Con todo, se han hallado en ti cosas buenas, pues hiciste desaparecer del país las aserás y dispusiste tu corazón para buscar a Dios'.


Todo Israel lo llorará, y le darán sepultura. Pero será el único de los de Jeroboán que entrará en un sepulcro, porque es el único de la casa de Jeroboán en quien se ha hallado algo bueno ante Yahveh, Dios de Israel.


Sed, pues, humildes bajo la poderosa mano de Dios, para que, a su debido tiempo, os exalte.


Hemos pecado, hemos sido rebeldes; y tú no has perdonado.


No castiga por capricho ni aflige a los hijos del hombre.


Jet. que no se han terminado las bondades de Yahveh ni se han agotado sus misericordias;


Que así dice el Excelso, el Sublime, que reside en la eternidad y cuyo nombre es santo: 'En lo alto y en lo santo resido, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para vivificar el espíritu de los humildes, para vivificar el corazón de los quebrantados.


Y si aún queda en él una décima parte, volverá a ser consumida. Como el terebinto y la encina, que, talados, conservan un tocón: semilla santa será su tocón'.


Quizá haya cincuenta justos en la ciudad. ¿Los aniquilarás, acaso, y no perdonarás al lugar por los cincuenta justos que hay allí?


Cada vez que el rey iba al templo de Yahveh, venían los de la guardia y traían los escudos, que luego devolvían a la sala de guardia.


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