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1 Tesalonicenses 5:14 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Os exhortamos, hermanos, a que reprendáis a los inquietos, animéis a los tímidos, sostengáis a los débiles y seáis comprensivos para con todos.

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Biblia Reina Valera 1960

14 También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Hermanos, les rogamos que amonesten a los perezosos. Alienten a los tímidos. Cuiden con ternura a los débiles. Sean pacientes con todos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Les rogamos también, hermanos, que reprendan a los indisciplinados, animen a los indecisos, sostengan a los débiles y tengan paciencia con todos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

14 Hermanos, también os exhortamos para que amonestéis a los desordenados, animéis a los desanimados, seáis apoyo de los débiles, pacientes con todos.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

14 También os exhortamos, hermanos, que amonestéis a los que andan desordenadamente, que confortéis a los de poco ánimo, que soportéis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.

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1 Tesalonicenses 5:14
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Proclama la palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, increpa, exhorta, con toda comprensión y sin cejar en la enseñanza.


Acoged benignamente al que es débil en la fe, sin criticar opiniones.


En todo procuré enseñaros con mi ejemplo que así, con fatigas, hay que socorrer a los necesitados y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: 'Hay más felicidad en dar que en recibir''.


A éste anunciamos nosotros advirtiendo y enseñando a todos los hombres en toda sabiduría, para que podamos presentarlos a todos ellos como hombres perfectos en Cristo.


Acordaos de los presos, como si compartierais con ellos la prisión; de los torturados, como si también vosotros estuvierais dentro de su piel.


Pero tú, que eres hombre de Dios, huye de estas cosas; corre en busca de la honradez, la piedad, la fe, el amor, la constancia, la mansedumbre.


con toda humildad y mansedumbre, con comprensión, soportándoos unos a otros con amor,


No os escribo estas cosas para avergonzaros, sino para haceros una advertencia como a hijos míos queridos.


Yo mismo buscaré las perdidas, traeré las descarriadas, vendaré a las heridas, curaré a las enfermas, vigilaré a las gordas y robustas y las apacentaré como es debido'.


Como un pastor apacienta su rebaño Él con su brazo recoge los corderos, en su regazo los lleva y conduce las madres.


Así, pues, vigilad, recordando que, a lo largo de tres años, ni de noche ni de día cesé de aconsejar con lágrimas a cada uno en particular.


La caña cascada no la quebrará, y no apagará la mecha mortecina, hasta que haga triunfar el juicio


en todas sus angustias. No fue un mensajero ni un ángel: él en persona los salvó. Por su amor y su piedad, él mismo los redimió, los levantó y los llevó todos los días de antaño.


Por lo tanto, fortaleced las manos débiles, afirmad las rodillas vacilantes


que el candidato sea irreprochable, fiel en el matrimonio, cuyos hijos sean creyentes y no estén acusados de mala conducta ni sean rebeldes.


no bebedor ni pendenciero, sino amable, conciliador, desinteresado;


Sed, por el contrario, amables y compasivos unos con otros y perdonaos mutuamente, como Dios os perdonó en Cristo.


Por el contrario, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, comprensión, paciencia, bondad, fidelidad,


Por lo tanto, os exhorto hermanos, por la misericordia de Dios, a que ofrezcáis vuestras propias personas como víctima viva, santa, agradable a Dios; sea éste vuestro culto espiritual.


porque ningún temor me impidió anunciaros todo el designio completo de Dios.


pero yo he rogado por ti, a fin de que tu fe no desfallezca. Y luego tú, cuando te hayas vuelto, confirma a tus hermanos'.


Pasarán sus casas a otros, campos y mujeres a la vez; porque voy a extender mi mano contra los habitantes del país -oráculo de Yahveh-.


Porque hay muchos rebeldes y charlatanes, especialmente entre los procedentes de la circuncisión, que inducen a engaño.


Pero no todos tienen ese conocimiento: algunos, por la costumbre idolátrica que hasta ahora han tenido, comen la carne como sacrificada a los ídolos y su conciencia, que es débil, se mancha con ello.


Pero no lo tratéis como a enemigo, sino corregidle como a hermano.


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