Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





1 Reyes 21:25 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Realmente no hubo nadie que se vendiera como Ajab para hacer el mal a los ojos de Yahveh. Fue su esposa Jezabel la que lo incitó.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

25 (A la verdad ninguno fue como Acab, que se vendió para hacer lo malo ante los ojos de Jehová; porque Jezabel su mujer lo incitaba.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

25 (Nunca nadie se entregó tanto a hacer lo que es malo a los ojos del Señor como Acab, bajo la influencia de su esposa Jezabel.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 No hubo nadie como Ajab para venderse y para hacer lo que es malo a los ojos de Yavé; era arrastrado a eso por su mujer Jezabel.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

25 (Ciertamente no hubo ninguno como Acab, que se vendió para hacer el mal ante los ojos de YHVH, incitado por su mujer Jezabel;

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

25 Pero ninguno fue como Acab, quien se vendió a hacer lo malo ante los ojos de Jehová, porque Jezabel su esposa lo incitaba.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




1 Reyes 21:25
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Ajab dijo a Elías: '¡Otra vez a mi encuentro mi enemigo!'. Él le respondió: 'Sí; otra vez a tu encuentro. Por haberte vendido para hacer el mal a los ojos de Yahveh,


Fosa profunda es la boca de la extraña: el odiado por Yahveh caerá en ella.


Y descubro que más amarga que la muerte es la mujer, porque es una trampa; su corazón, una red; sus brazos, cadenas. El que es grato a Dios logra escapar; pero el pecador queda prisionero de ella.


-Estoy hablando en términos humanos, a causa de vuestra natural limitación-. Pues bien, así como ofrecisteis vuestros miembros al servicio de la impureza y de la inmoralidad, hasta caer en la inmoralidad total, así también ofreced ahora vuestros miembros al servicio de la justicia, hasta llegar a la santidad.


Pero los judíos recalcitrantes excitaron y enconaron los ánimos de los gentiles contra los hermanos.


Su esposa Jezabel le contestó: '¿Y tú ejerces ahora el poder real sobre Israel? ¡Levántate y come algo, y alégrese tu corazón! Yo me encargo de darte la viña de Nabot de Yizreel'.


Solivientaron, pues, al pueblo, a los ancianos y a los escribas, y echándose sobre él, lo prendieron y lo condujeron al sanedrín.


que así dice Yahveh: 'Gratis fuisteis vendidos y sin dinero seréis redimidos'.


Así dice Yahveh: '¿Dónde está el libelo de repudio de vuestra madre, por el cual yo la habría repudiado, o quién de mis acreedores es aquel a quien yo os habría vendido? Mirad: por vuestras culpas habéis sido vendidos y por vuestros pecados ha sido repudiada vuestra madre.


No hubo antes de él ningún rey como él, que se volviera a Yahveh con todo su corazón y con toda su alma y con todas sus fuerzas, conformándose en todo con la ley de Moisés; ni tampoco después de él surgió otro semejante.


Incluso hicieron pasar a sus hijos y a sus hijas por el fuego, practicaron la adivinación y la hechicería y se entregaron a hacer lo que es malo a los ojos de Yahveh, con lo que provocaron su cólera.


Entonces Jezabel envió un mensajero a Elías con este aviso: 'Esto me hagan los dioses y esto me añadan, si mañana a estas horas no hago contigo igual que se hizo con cada uno de aquéllos'.


pues cuando Jezabel intentó exterminar a los profetas de Yahveh, Abdías recogió a cien profetas, los escondió en unas cavernas en dos grupos de cincuenta y les proveyó de pan y de agua.


Sabemos, desde luego, que la ley es espiritual; pero yo soy de carne y hueso, vendido como esclavo al pecado.


Pero tengo contra ti que toleras a Jezabel, esa mujer que se proclama a sí misma profetisa y enseña y seduce a mis siervos a fornicar y a comer de lo inmolado a los ídolos.


Él le respondió: 'No soy yo el que trae calamidades a Israel, sino tú y la casa de tu padre, porque habéis abandonado los mandamientos de Yahveh, y os habéis ido tras de los baales.


Ocozías, hijo de Ajab, subió al trono de Israel en Samaría el año diecisiete de Josafat, rey de Judá, y reinó dos años sobre Israel.


Entró él, y después de comer y beber, ordenó: 'Id a ver a esa maldita y enterradla, pues es hija de rey'.


No tomes sus hijas para mujeres de tus hijos, porque al prostituirse sus hijas ante sus propios dioses, pueden arrastrar a tus hijos a que se prostituyan a su vez ante los dioses de ellas.


Omrí hizo el mal ante los ojos de Yahveh y fue peor aún que todos los que le precedieron,


Hizo el mal a los ojos de Yahveh, pues siguió el camino de su padre y el de su madre y el de Jeroboán, hijo de Nebat, que hizo pecar a Israel.


Cuando Jorán vio a Jehú, le preguntó: 'Jehú, ¿hay paz?'. Respondió él: '¿Qué paz va a haber, mientras duren las prostituciones de tu madre Jezabel y sus muchas hechicerías?'.


¿Acaso no fue por esto por lo que pecó Salomón, rey de Israel? Entre tantas naciones, no hubo rey como él. Fue amado de su Dios, y Dios lo constituyó rey de todo Israel. Pero también a él le hicieron pecar las mujeres extranjeras.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម