1 Reyes 15:18 - Biblia Serafín de Ausejo 197518 Entonces Asá tomó cuanta plata y oro quedaba en el tesoro del templo de Yahveh y en el del palacio real y se los entregó a sus servidores, para que se los llevasen a Ben Hadad, hijo de Tabrimón, hijo de Jezión, rey de Aram, que residía en Damasco, con este propósito: សូមមើលជំពូកកំណែច្រើនទៀតBiblia Reina Valera 196018 Entonces tomando Asa toda la plata y el oro que había quedado en los tesoros de la casa de Jehová, y los tesoros de la casa real, los entregó a sus siervos, y los envió el rey Asa a Ben-adad hijo de Tabrimón, hijo de Hezión, rey de Siria, el cual residía en Damasco, diciendo: សូមមើលជំពូកBiblia Nueva Traducción Viviente18 En respuesta, Asa tomó toda la plata y todo el oro que quedaban en los tesoros del templo del Señor y del palacio real, y encargó a unos de sus funcionarios que le enviaran todo a Ben-adad, hijo de Tabrimón, hijo de Hezión, rey de Aram, que gobernaba en Damasco, junto con el siguiente mensaje: សូមមើលជំពូកBiblia Católica (Latinoamericana)18 Azá juntó entonces toda la plata y todo el oro que quedaban en los tesoros de la Casa de Yavé y en los tesoros del palacio real, se los pasó a sus servidores y los envió donde Ben-Hadad, hijo de Tabinom, hijo de Hezión, que era rey de Aram, en Damasco. Le llevaron este mensaje: សូមមើលជំពូកLa Biblia Textual 3a Edicion18 Asa tomó entonces toda la plata y el oro que habían quedado en los tesoros de la Casa de YHVH, juntamente con los tesoros de la casa real, y entregándolos en mano de sus servidores, el rey Asa los envió a Ben-hadad, hijo de Tabrimón, hijo de Hezión, rey de Siria, que habitaba en Damasco, diciendo: សូមមើលជំពូកBiblia Reina Valera Gómez (2023)18 Entonces tomando Asa toda la plata y el oro que había quedado en los tesoros de la casa de Jehová, y los tesoros de la casa real, los entregó en las manos de sus siervos, y los envió el rey Asa a Benadad, hijo de Tabrimón, hijo de Hezión, rey de Siria, el cual residía en Damasco, diciendo: សូមមើលជំពូក |
Pero Joás, rey de Judá, tomó todas las cosas sagradas que habían ofrecido Josafat, Jorán y Ocozías, sus antepasados, reyes de Judá, las que había ofrecido él mismo y todo el oro que se pudo hallar en el tesoro del templo de Yahveh y en el del palacio real, y lo envió a Jazael, rey de Aram, el cual desistió de subir contra Jerusalén.