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Santiago 3:2 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

2 Porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

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Biblia Reina Valera 1960

2 Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Es cierto que todos cometemos muchos errores. Pues, si pudiéramos dominar la lengua, seríamos perfectos, capaces de controlarnos en todo sentido.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 y todos tenemos nuestras fallas. El que no peca en palabras es un hombre perfecto de verdad, pues es capaz de dominar toda su persona.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 Porque todos ofendemos muchas veces; si alguno no ofende de palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 pues todos fallamos muchas veces. Si alguno no falla en el hablar, ése es varón perfecto, capaz de refrenar todo el cuerpo.

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Santiago 3:2
29 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Si alguno parece ser religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana.


El que guarda su boca guarda su alma; pero el que mucho abre sus labios tendrá destrucción.


Porque el que quiera amar la vida, y ver días buenos, refrene su lengua de mal, y sus labios no hablen engaño;


Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.


Guarda tu lengua del mal, y tus labios de hablar engaño.


¿Quién podrá decir: Yo he limpiado mi corazón, limpio estoy de mi pecado?


Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.


Como está escrito: No hay justo, ni aun uno.


Mas tenga la paciencia su obra perfecta, para que seáis perfectos y cabales, y que nada os falte.


Si hubieren pecado contra ti (porque no hay hombre que no peque), y tú estuvieres airado contra ellos, y los entregares delante del enemigo, y estos los llevaren cautivos a la tierra del enemigo, sea lejos o cerca,


Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos.


Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento.


sino que sujeto mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre; no sea que habiendo predicado a otros, yo mismo venga a ser reprobado.


os haga perfectos para toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo Él en vosotros lo que es agradable delante de Él por Jesucristo; al cual sea gloria para siempre jamás. Amén.


Os saluda Epafras, el cual es uno de vosotros, siervo de Cristo; siempre esforzándose por vosotros en oración, para que estéis firmes, perfectos y completos en toda la voluntad de Dios.


A quien nosotros predicamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre.


Mas la Escritura encerró todo bajo pecado, para que la promesa por la fe de Jesucristo, fuese dada a los que creen.


Hallo, pues, esta ley, que cuando quiero hacer el bien, el mal está en mí.


Y si pecaren contra ti (pues no hay hombre que no peque), y te enojares contra ellos, y los entregares delante de sus enemigos, y estos los llevaren cautivos a tierra lejana o cercana;


Y el Dios de toda gracia, que nos ha llamado a su gloria eterna por Cristo Jesús, después que hubiereis padecido un poco de tiempo, Él mismo os perfeccione, afirme, corrobore y establezca.


Porque la carne codicia contra el Espíritu, y el Espíritu contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no podáis hacer lo que quisiereis.


Al Músico principal, a Jedutún: Salmo de David Yo dije: Atenderé a mis caminos, para no pecar con mi lengua: Guardaré mi boca con freno, en tanto que el impío esté delante de mí.


En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente.


El que guarda su boca y su lengua, guarda su alma de angustias.


¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.


el sacerdote mirará: y si en la piel de su carne parecieren manchas blancas algo oscurecidas, es empeine que brotó en la piel, está limpia la persona.


para que vuelvas tu espíritu contra Dios, y saques tales palabras de tu boca?


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