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Salmos 63:8 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

8 Mi alma está aferrada a ti; tu diestra me ha sostenido.

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Biblia Reina Valera 1960

8 Está mi alma apegada a ti; Tu diestra me ha sostenido.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Me aferro a ti; tu fuerte mano derecha me mantiene seguro.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Mi alma se estrecha a ti con fuerte abrazo y tu diestra me toma de la mano.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 Mi alma está apegada a ti y te sigue, Tu diestra me sostiene con vigor.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 pues tú eres mi auxilio, y a la sombra de tus alas soy dichoso.

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Salmos 63:8
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; sí, siempre te ayudaré, siempre te sostendré con la diestra de mi justicia.


Me diste también el escudo de tu salvación, y tu diestra me sustentó, y tu benignidad me ha engrandecido.


Con todo, yo siempre estuve contigo; Me trabaste de mi mano derecha.


Su izquierda esté debajo de mi cabeza, y su derecha me abrace.


Cuando caiga, no quedará postrado, porque Jehová sostiene su mano.


He aquí mi siervo, a quien yo sostengo; mi escogido en quien mi alma tiene contentamiento. He puesto sobre Él mi Espíritu, Él traerá juicio a las naciones.


Cuando yo decía: Mi pie resbala: Tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba.


¿A quién tengo yo en el cielo, sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.


En cuanto a mí, en mi integridad me has sustentado, y me has afirmado delante de tu rostro para siempre.


Por lo cual también trabajo, luchando según su poder, el cual obra poderosamente en mí.


Y desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino del cielo sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.


Con mi alma te he deseado en la noche; y con mi espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque cuando tus juicios están en la tierra, los habitantes del mundo aprenden justicia.


En todo cuanto comenzó en el servicio de la casa de Dios, y en la ley y mandamientos, buscó a su Dios, y lo hizo de todo corazón, y fue prosperado.


Porfiad a entrar por la puerta estrecha; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.


Me levantaré ahora, y rondaré la ciudad; por las calles y por las plazas buscaré al que ama mi alma; lo busqué, pero no lo hallé.


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