Proverbios 3:34 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁴ Ciertamente Él escarnece a los escarnecedores, y a los humildes da gracia.

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Biblia Reina Valera 1960

³⁴ Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, Y a los humildes dará gracia.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁴ El Señor se burla de los burlones, pero muestra su bondad a los humildes.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁴ Se burla de los burlones, concede su favor a los humildes.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁴ Ciertamente a los escarnecedores escarnece, Y da gracia a los humildes.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁴ se burla de quienes son burlones y concede su favor a los humildes.

Proverbios 3:34 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Santiago 4:6

Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

1 Pedro 5:5

Igualmente, jóvenes, sujetaos a los ancianos; y todos sujetaos unos a otros, y vestíos de humildad; porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

Proverbios 9:12

Si fueres sabio, para ti mismo serás sabio; mas si fueres escarnecedor, tú solo lo sufrirás.

Salmos 138:6

Aunque Jehová es excelso, atiende al humilde; mas al altivo mira de lejos.

Isaías 57:15

Porque así dice el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es Santo: Yo habito en el lugar alto y santo, y con el que es de espíritu humilde y contrito, para vivificar el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los contritos.

Proverbios 21:24

Soberbio, presuntuoso y escarnecedor, es el nombre del que obra con arrogante saña.

Proverbios 19:29

Juicios están preparados para los escarnecedores, y azotes para la espalda de los necios.

Salmos 18:26

Puro te mostrarás para con el puro, y severo te mostrarás para con el perverso.

Proverbios 14:9

Los necios se mofan del pecado; mas entre los rectos hay favor.

Proverbios 16:19

Mejor es ser de espíritu humilde con los humildes, que repartir despojos con los soberbios.

Proverbios 1:26

También yo me reiré de vuestra calamidad; me burlaré cuando os venga lo que teméis;