Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Marcos 8:38 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

38 Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras en esta generación perversa y adúltera, el Hijo del Hombre se avergonzará también de él, cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

38 Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, el Hijo del Hombre se avergonzará también de él, cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

38 Si alguien se avergüenza de mí y de mi mensaje en estos días de adulterio y de pecado, el Hijo del Hombre se avergonzará de esa persona cuando regrese en la gloria de su Padre con sus santos ángeles».

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

38 Yo les aseguro: si alguno se avergüenza de mí y de mis palabras en medio de esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del Hombre se avergonzará de él cuando venga con la Gloria de su Padre rodeado de sus santos ángeles.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

38 Porque el que se avergüence de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del Hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

38 Porque, si alguno se avergüenza de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Marcos 8:38
44 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Porque no me avergüenzo del evangelio de Cristo; porque es el poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.


Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo tiene también al Padre.


Adúlteros y adúlteras, ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quisiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.


Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras, de este se avergonzará el Hijo del Hombre cuando viniere en su gloria, y en la del Padre, y de los santos ángeles.


Por tanto, no te avergüences del testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo; antes sé partícipe de las aflicciones del evangelio según el poder de Dios,


Jesús le dijo: Tú lo has dicho. Además os digo: Desde ahora veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra de poder, y viniendo en las nubes del cielo.


Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles; y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.


Teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros en Egipto; porque tenía puesta su mirada en el galardón.


Pero ahora anhelaban una mejor patria, esto es, la celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les había preparado una ciudad.


Por cuya causa asimismo padezco estas cosas; mas no me avergüenzo; porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que Él es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.


Pero Él respondió y les dijo: La generación perversa y adúltera demanda señal; mas señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás.


Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí en adelante veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subiendo y descendiendo sobre el Hijo del Hombre.


Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con Él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria;


Y entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; entonces se lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo en las nubes del cielo, con poder y gran gloria.


Pues yo os digo que a todo el que tiene le será dado; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.


El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todo lo que hace tropezar, y a los que hacen iniquidad;


Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí en las nubes del cielo uno como el Hijo del Hombre que venía, y llegó hasta el Anciano de días, y le hicieron llegar delante de Él.


Un río de fuego procedía y salía de delante de Él: millares de millares le servían, y millones de millones asistían delante de Él. El Juez se sentó, y los libros fueron abiertos.


Y dijo: Jehová vino de Sinaí, y de Seir les esclareció; resplandeció del monte de Parán, y vino con diez mil santos; a su diestra la ley de fuego para ellos.


Salgamos, pues, a Él, fuera del campamento, llevando su vituperio.


Dé el Señor misericordia a la casa de Onesíforo; que muchas veces me dio refrigerio, y no se avergonzó de mis cadenas;


Mas lejos esté de mí gloriarme, salvo en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.


Y ellos partieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por su Nombre.


La multitud le respondió: Nosotros hemos oído de la ley, que el Cristo permanece para siempre: ¿Cómo, pues, dices tú que es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado? ¿Quién es este Hijo del Hombre?


y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre.


Y el Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.


Y Jesús le dijo: Yo soy; y veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del poder, y viniendo en las nubes del cielo.


La generación perversa y adúltera demanda señal; mas señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás. Y dejándolos, se fue.


Y huiréis al valle de las montañas; porque el valle de las montañas llegará hasta Azel; y huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías, rey de Judá: y vendrá Jehová mi Dios, y todos los santos con Él.


Y Jesús le dijo: Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene donde recostar su cabeza.


De cierto os digo que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan visto al Hijo del Hombre viniendo en su reino.


¿O qué recompensa dará el hombre por su alma?


Y entonces verán al Hijo del Hombre, viniendo en las nubes con gran poder y gloria.


Y ellos dijeron: Cornelio, el centurión, varón justo y temeroso de Dios, y de buen testimonio en toda la nación de los judíos, fue avisado de Dios por un santo Ángel, de hacerte venir a su casa, y oír de ti palabras.


Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de gloria? ¿No lo sois, pues, vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo en su venida?


para que sean afirmados vuestros corazones en santidad, irreprensibles delante de Dios y Padre nuestro, para la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos sus santos.


Y ahora, hijitos, permaneced en Él; para que cuando Él apareciere, tengamos confianza, y no seamos avergonzados delante de Él en su venida.


él también beberá del vino de la ira de Dios, el cual es vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles, y delante del Cordero.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម