Marcos 4:38 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁸ Y Él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal, y despertándole, le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?

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Biblia Reina Valera 1960

³⁸ Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁸ Jesús estaba dormido en la parte posterior de la barca, con la cabeza recostada en una almohada. Los discípulos lo despertaron: «¡Maestro! ¿No te importa que nos ahoguemos?», gritaron.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁸ Mientras tanto Jesús dormía en la popa sobre un cojín. Lo despertaron diciendo: 'Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?'

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁸ Y Él estaba en popa, durmiendo sobre el cabezal. Y lo despiertan° y le dicen: ¡Maestro!, ¿no te importa que perezcamos?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁸ Mientras tanto, él seguía durmiendo en la popa sobre un cabezal. Ellos lo despiertan y le dicen: 'Maestro, ¿es que no te importa que nos hundamos?'.

Marcos 4:38 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

1 Pedro 5:7

echando toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros.

Hebreos 4:15

Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas; sino uno que fue tentado en todo como nosotros, pero sin pecado.

Mateo 8:25

Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: Señor, sálvanos, que perecemos.

Lucas 8:24

Y viniendo a Él, le despertaron, diciendo: ¡Maestro, Maestro, que perecemos! Y despertado Él, reprendió al viento y al levantamiento de las aguas; y cesaron, y fue hecha bonanza.

Isaías 64:12

¿Te quedarás quieto, oh Jehová, sobre estas cosas? ¿Callarás, y nos afligirás sobremanera?

Hebreos 2:17

Por cuanto le era preciso ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel Sumo Sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo.

Juan 4:6

y estaba allí el pozo de Jacob. Entonces Jesús, cansado del camino, se sentó así junto al pozo; y era como la hora sexta.

Isaías 63:15

Mira desde el cielo, y contempla desde la morada de tu santidad y de tu gloria: ¿Dónde está tu celo, y tu fortaleza, la conmoción de tus entrañas y de tus misericordias para conmigo? ¿Se han estrechado?

Lamentaciones 3:8

Aun cuando clamé y di voces, cerró los oídos a mi oración.

Mateo 22:16

Y le enviaron los discípulos de ellos, con los herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres veraz, y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que no te cuidas de ningún hombre, porque no miras la apariencia del hombre.

Marcos 4:37

Y se levantó una gran tempestad de viento, y las olas azotaban la barca, de manera que ya se anegaba.

Marcos 4:39

Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento. Y se hizo grande bonanza.