Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Juan 5:6 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 Cuando Jesús le vio postrado, y entendió que hacía mucho tiempo que estaba enfermo, le dijo: ¿Quieres ser sano?

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

6 Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Cuando Jesús lo vio y supo que hacía tanto que padecía la enfermedad, le preguntó: —¿Te gustaría recuperar la salud?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Jesús lo vio tendido, y cuando se enteró del mucho tiempo que estaba allí, le dijo: '¿Quieres sanar?'

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Cuando Jesús lo vio tendido, y conociendo que llevaba° ya mucho tiempo así,° le dice: ¿Quieres ser sano?°

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Al verlo Jesús tendido, y sabiendo que llevaba ya mucho tiempo así, le pregunta: '¿Quieres curarte?'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Juan 5:6
9 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas; sino uno que fue tentado en todo como nosotros, pero sin pecado.


diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que reciba la vista.


Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de Aquél a quien tenemos que dar cuenta.


Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro, entristecido de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? Le dijo: Señor, tú sabes todas las cosas; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.


Fui buscado de los que no preguntaban por mí; fui hallado de los que no me buscaban. Dije a una nación que no invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí.


Cuando mi espíritu se agobiaba dentro de mí, tú conociste mi senda. En el camino en que andaba, me escondieron lazo.


He visto tus adulterios y tus relinchos, la lascivia de tu prostitución y tus abominaciones en los collados, en los campos. ¡Ay de ti, Jerusalén! ¿No serás al fin limpia? ¿Hasta cuándo será?


Y estaba allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo.


Señor, le respondió el enfermo, no tengo hombre que me meta en el estanque cuando el agua es agitada; pues entre tanto que yo vengo, otro desciende antes que yo.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម