Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Hechos 8:30 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

30 Y corriendo Felipe hacia él, le oyó que leía el profeta Isaías, y le dijo: ¿Entiendes lo que lees?

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

30 Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Felipe se acercó corriendo y oyó que el hombre leía al profeta Isaías. Felipe le preguntó: —¿Entiendes lo que estás leyendo?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Y mientras Felipe corría, le oía leer al profeta Isaías. Le preguntó: '¿Entiendes lo que estás leyendo?'

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Corriendo Felipe, lo oyó leyendo al profeta Isaías, y dijo: Pero, ¿entiendes lo que lees?

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Corrió Felipe a su lado y oyó que iba leyendo al profeta Isaías. Y le dijo: '¿Crees que entiendes lo que vas leyendo?'.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Hechos 8:30
18 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí.


Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.


Y llamó a sí a la multitud, y les dijo: Oíd, y entended:


Mas el que fue sembrado en buena tierra, este es el que oye la palabra y la entiende, y lleva fruto; y lleva uno a ciento, y otro a sesenta, y otro a treinta por uno.


Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado junto al camino.


Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el sepulcro, adonde tú vas, no hay obra, ni industria, ni conocimiento ni sabiduría.


pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida.


Mas cuando viereis la abominación desoladora, de que habló el profeta Daniel, que estará donde no debe estar (el que lee, entienda), entonces los que estén en Judea, huyan a las montañas;


Por tanto, cuando viereis la abominación desoladora, que fue dicha por el profeta Daniel, que estará en el lugar santo (el que lee, entienda).


Jesús les dice: ¿Habéis entendido todas estas cosas? Ellos respondieron: Sí, Señor.


Por el camino de tus mandamientos correré, cuando tú ensanches mi corazón.


Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia; porque es el número del hombre; y su número es seiscientos sesenta y seis.


Entonces él se levantó, y fue. Y he aquí un etíope, eunuco, hombre de gran autoridad bajo Candace reina de los etíopes, el cual estaba a cargo de todos sus tesoros, y había venido a Jerusalén para adorar,


Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.


Entonces Felipe descendió a la ciudad de Samaria, y les predicaba a Cristo.


Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a este carro.


Y dijo: ¿Cómo podré, a no ser que alguien me enseñe? Y rogó a Felipe que subiese y se sentase con él.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម