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Hebreos 13:6 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 De manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; y: No temeré lo que me pueda hacer el hombre.

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Biblia Reina Valera 1960

6 de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Así que podemos decir con toda confianza: «El Señor es quien me ayuda, por tanto, no temeré. ¿Qué me puede hacer un simple mortal?».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Y nosotros hemos de responder confiados: El Señor es mi socorro, no temeré. ¿Qué pueden hacerme los hombres?

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 De manera que podemos decir osadamente: El Señor es mi ayudador, no temeré. ¿Qué me puede hacer el hombre?°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Y así, nosotros podemos confiadamente decir: El Señor es quien me ayuda; nada temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

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Hebreos 13:6
29 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; sí, siempre te ayudaré, siempre te sostendré con la diestra de mi justicia.


¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios por nosotros, ¿quién contra nosotros?


Nuestra ayuda está en el nombre de Jehová, que hizo el cielo y la tierra.


Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.


En Dios alabaré su palabra: En Dios he confiado, no temeré lo que me pueda hacer el hombre.


Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a Aquél que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.


He aquí, Dios es mi ayudador; el Señor es con los que sostienen mi alma.


Nuestra alma espera en Jehová; Nuestra ayuda y nuestro escudo es Él.


Porque tú has sido mi socorro; y así en la sombra de tus alas me regocijaré.


Si no me hubiera ayudado Jehová, mi alma casi habría habitado en el silencio.


Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi Libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.


Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y soy tu galardón sobremanera grande.


en quien tenemos seguridad y acceso con confianza por medio de la fe de Él.


Bienaventurado tú, oh Israel, ¿Quién como tú, pueblo salvo por Jehová, escudo de tu socorro, y espada de tu excelencia? Así que tus enemigos serán humillados, y tú hollarás sobre sus lugares altos.


No temas, gusano de Jacob, ni vosotros, varones de Israel; yo te ayudaré, dice Jehová, tu Redentor, el Santo de Israel.


No escondas tu rostro de mí, no apartes con ira a tu siervo: Tú has sido mi ayuda; no me abandones ni me desampares, Dios de mi salvación.


No confiéis en príncipes, ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación.


No hay como el Dios de Jesurún, que cabalga sobre el cielo para tu ayuda, y sobre las nubes en su majestad.


y el otro se llamaba Eliezer, porque dijo: El Dios de mi padre me ayudó, y me libró de la espada de Faraón.


Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el lugar santísimo por la sangre de Jesús,


Y le dijo: No temas, que no te hallará la mano de Saúl, mi padre, y tú reinarás sobre Israel, y yo seré segundo después de ti; y aun Saúl, mi padre, así lo sabe.


Y la palabra de Jehová vino a él, diciendo:


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