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Eclesiastés 3:16 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 Vi más debajo del sol: que en el lugar del juicio, estaba la impiedad; y en el lugar de la justicia, estaba la iniquidad.

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Biblia Reina Valera 1960

16 Vi más debajo del sol: en lugar del juicio, allí impiedad; y en lugar de la justicia, allí iniquidad.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 También noté que, bajo el sol, la maldad está presente en el juzgado. Sí, ¡hasta en los tribunales de justicia hay corrupción!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Vi otras cosas bajo el sol: en vez de derecho se encuentra la injusticia; en la sede de la justicia se sienta el malvado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 Vi más debajo del sol: en el lugar del derecho, allí la impiedad; y en el lugar de la justicia, allí la iniquidad.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 He visto también bajo el sol que en la sede del derecho reina la iniquidad, y en la sede de la justicia, la prevaricación.

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Eclesiastés 3:16
15 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Y me volví, y consideré todas las opresiones que se hacen debajo del sol; y he aquí, las lágrimas de los oprimidos, sin tener quien los consuele; y el poder estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador.


Si miras opresión de pobres, y extorsión de derecho y de justicia en una provincia, no te maravilles de ello; porque sobre el alto está mirando otro más alto, y uno más alto está sobre ellos.


Entonces Pablo le dijo: Dios te golpeará a ti, pared blanqueada: ¿Pues tú estás sentado para juzgarme conforme a la ley, y contra la ley me mandas golpear?


Pero vosotros habéis menospreciado al pobre. ¿No os oprimen los ricos, y os arrastran a los juzgados?


Y los príncipes de los sacerdotes y los ancianos y todo el concilio, buscaban falso testimonio contra Jesús, para entregarle a muerte,


Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan hueso para la mañana.


Para completar la maldad con ambas manos, el príncipe demanda, y el juez juzga por recompensa; el grande habla el antojo de su alma, y lo confirman.


Y codician campos, y los roban; y casas, y las toman; oprimen al hombre y a su casa, al hombre y a su heredad.


Y el derecho se retiró, y la justicia se puso lejos; porque la verdad tropezó en la plaza, y la equidad no pudo entrar.


Todo esto he visto, y he puesto mi corazón en todo lo que se hace debajo del sol; hay tiempo en que el hombre se enseñorea del hombre para su propio mal.


Porque en la multitud de sueños y en las muchas palabras también abundan las vanidades; mas tú, teme a Dios.


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