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2 Pedro 3:16 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 como también en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.

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Biblia Reina Valera 1960

16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 al tratar estos temas en todas sus cartas. Algunos de sus comentarios son difíciles de entender, y los que son ignorantes e inestables han tergiversado sus cartas para que signifiquen algo muy diferente, así como lo hacen con otras partes de la Escritura. Esto resultará en su propia destrucción.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

16 e insiste sobre esto en todas sus cartas. Hay en ellas algunos puntos difíciles de entender, que los ignorantes y poco firmes en la fe interpretan torcidamente para su propio daño, como hacen también con las demás Escrituras.

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 como también habla de esto en todas las epístolas, en las cuales hay algunas cosas difíciles de entender, que los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 De esto hablaba en todas sus cartas. Hay en ellas cosas difíciles de entender, que los indoctos y vacilantes interpretan torcidamente, como lo hacen con las otras escrituras, para su propia perdición.

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2 Pedro 3:16
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

y no honra a su padre o a su madre, será libre. Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición.


Del cual tenemos mucho que decir, y difícil de describir, por cuanto sois tardos para oír.


Tienen los ojos llenos de adulterio, y no pueden dejar de pecar. Seducen a las almas inestables, tienen un corazón ejercitado en la codicia; son hijos de maldición.


El hombre de doble ánimo, es inconstante en todos sus caminos.


cuyo fin será destrucción, cuyo dios es su vientre, y cuya gloria es su vergüenza, que sólo piensan en lo terrenal.


Y nunca más mencionaréis la carga de Jehová; porque la palabra de cada hombre será su carga; porque habéis pervertido las palabras del Dios vivo, de Jehová de los ejércitos, Dios nuestro.


Y: Piedra de tropiezo, y roca de escándalo a los que tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; para lo cual fueron también ordenados.


Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis, no conociendo las Escrituras, ni el poder de Dios.


Por lo cual la ley es debilitada, y el juicio no sale verdadero; por cuanto el impío asedia al justo, por eso sale torcido el juicio.


Todos los días pervierten mis palabras; contra mí son todos sus pensamientos para mal.


Porque ciertos hombres han entrado encubiertamente, los cuales desde antes fueron ordenados para esta condenación, hombres impíos, que cambian la gracia de nuestro Dios en libertinaje, negando al único Señor Dios, y a nuestro Señor Jesucristo.


Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.


Pero Él respondió y les dijo: ¿Por qué también vosotros quebrantáis el mandamiento de Dios por vuestra tradición?


Pedro, apóstol de Jesucristo, a los expatriados esparcidos por todo Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia,


Y cuando la reina de Seba oyó la fama de Salomón, debido al nombre de Jehová, vino a probarle con preguntas difíciles.


No tuerzas el derecho; no hagas acepción de personas, ni tomes soborno; porque el soborno ciega los ojos de los sabios, y pervierte las palabras de los justos.


No pervertirás el derecho de tu pobre en su pleito.


No seguirás a los muchos para hacer el mal; ni responderás en litigio inclinándote a los más para torcer el juicio;


Inestable como las aguas, no serás el principal; por cuanto subiste al lecho de tu padre; entonces te envileciste, subiendo a mi estrado.


para que tengáis memoria de las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y del mandamiento de nosotros los apóstoles del Señor y Salvador;


Por lo cual, amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia que seáis hallados de Él en paz, sin mácula y sin reprensión.


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