Santiago 4:8 - Biblia Reina Valera 1960

⁸ Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Acérquense a Dios, y Dios se acercará a ustedes. Lávense las manos, pecadores; purifiquen su corazón, porque su lealtad está dividida entre Dios y el mundo.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ acérquense a Dios y él se acercará a ustedes. Purifíquense las manos, pecadores; santifiquen sus corazones, indecisos.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ ¡Acercaos a Dios, y Él se acercará a vosotros! ¡Limpiaos las manos, oh pecadores, y purificaos los corazones, los que sois de doble ánimo!°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Acercaos a Dios, y Él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; los que obráis con doblez, purificad los corazones.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁸ Acercaos a Dios, y Él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad vuestras manos; y vosotros de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

Santiago 4:8 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Salmos 145:18

Cercano está Jehová a todos los que le invocan, A todos los que le invocan de veras.

Hebreos 10:22

acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura.

Malaquías 3:7

Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos. Mas dijisteis: ¿En qué hemos de volvernos?

Zacarías 1:3

Diles, pues: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos a mí, dice Jehová de los ejércitos, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos.

2 Crónicas 15:2

y salió al encuentro de Asa, y le dijo: Oídme, Asa y todo Judá y Benjamín: Jehová estará con vosotros, si vosotros estuviereis con él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, él también os dejará.

Jeremías 4:14

Lava tu corazón de maldad, oh Jerusalén, para que seas salva. ¿Hasta cuándo permitirás en medio de ti los pensamientos de iniquidad?

1 Juan 3:3

Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.

Salmos 51:10

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.

Hebreos 7:19

(pues nada perfeccionó la ley), y de la introducción de una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios.

2 Corintios 7:1

Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.

Ezequiel 18:31

Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis, casa de Israel?

Salmos 73:28

Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien; He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, Para contar todas tus obras.

1 Crónicas 28:9

Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares, él te desechará para siempre.

1 Pedro 3:21

El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo,

Job 17:9

No obstante, proseguirá el justo su camino, Y el limpio de manos aumentará la fuerza.

Mateo 12:33

O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol.

1 Timoteo 2:8

Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.

Isaías 29:13

Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado;

Salmos 24:4

El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas, Ni jurado con engaño.

1 Pedro 1:22

Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro;

Salmos 18:20

Jehová me ha premiado conforme a mi justicia; Conforme a la limpieza de mis manos me ha recompensado.

Santiago 1:8

El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.

Salmos 26:6

Lavaré en inocencia mis manos, Y así andaré alrededor de tu altar, oh Jehová,

Hechos 15:9

y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones.

Génesis 18:23

Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío?

Job 16:17

A pesar de no haber iniquidad en mis manos, Y de haber sido mi oración pura.

Mateo 15:2

¿Por qué tus discípulos quebrantan la tradición de los ancianos? Porque no se lavan las manos cuando comen pan.

Jeremías 4:11

En aquel tiempo se dirá a este pueblo y a Jerusalén: Viento seco de las alturas del desierto vino a la hija de mi pueblo, no para aventar, ni para limpiar.

Job 9:30

Aunque me lave con aguas de nieve, Y limpie mis manos con la limpieza misma,

Isaías 13:15

Cualquiera que sea hallado será alanceado; y cualquiera que por ellos sea tomado, caerá a espada.

Salmos 73:13

Verdaderamente en vano he limpiado mi corazón, Y lavado mis manos en inocencia;

Mateo 27:24

Viendo Pilato que nada adelantaba, sino que se hacía más alboroto, tomó agua y se lavó las manos delante del pueblo, diciendo: Inocente soy yo de la sangre de este justo; allá vosotros.

1 Samuel 14:35

Y edificó Saúl altar a Jehová; este altar fue el primero que edificó a Jehová.

Salmos 119:113

Aborrezco a los hombres hipócritas; Mas amo tu ley.

Isaías 58:2

Que me buscan cada día, y quieren saber mis caminos, como gente que hubiese hecho justicia, y que no hubiese dejado la ley de su Dios; me piden justos juicios, y quieren acercarse a Dios.

Santiago 3:17

Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.

Lamentaciones 3:57

Te acercaste el día que te invoqué; dijiste: No temas.