Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 32:5 - Biblia Reina Valera 1960

5 Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Finalmente te confesé todos mis pecados y ya no intenté ocultar mi culpa. Me dije: «Le confesaré mis rebeliones al Señor», ¡y tú me perdonaste! Toda mi culpa desapareció. Interludio

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 Te confesé mi pecado, no te escondí mi culpa. Yo dije:' Ante el Señor confesaré mi falta'. Y tú, tu perdonaste mi pecado, condonaste mi deuda.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

5 Mi pecado te hice saber y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a YHVH, Y Tú mismo° cargaste° con la maldad de mi pecado. Selah

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Te confesé mis faltas y no encubrí mis culpas, pensando: 'Confesaré mis yerros al Señor', y tú me perdonaste el mal de mi pecado. Selah

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

5 Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado. (Selah)

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 32:5
37 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.


Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová. Y Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no morirás.


Por tanto, confesaré mi maldad, Y me contristaré por mi pecado.


Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído.


Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará.


Él mira sobre los hombres; y al que dijere: Pequé, y pervertí lo recto, Y no me ha aprovechado,


Después que David hubo censado al pueblo, le pesó en su corazón; y dijo David a Jehová: Yo he pecado gravemente por haber hecho esto; mas ahora, oh Jehová, te ruego que quites el pecado de tu siervo, porque yo he hecho muy neciamente.


Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.


Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría.


Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.


Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; mas aquel a quien se le perdona poco, poco ama.


Él es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias;


Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad,


Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.


¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová, haciendo lo malo delante de sus ojos? A Urías heteo heriste a espada, y tomaste por mujer a su mujer, y a él lo mataste con la espada de los hijos de Amón.


Entonces Josué dijo a Acán: Hijo mío, da gloria a Jehová el Dios de Israel, y dale alabanza, y declárame ahora lo que has hecho; no me lo encubras.


Reconoce, pues, tu maldad, porque contra Jehová tu Dios has prevaricado, y fornicaste con los extraños debajo de todo árbol frondoso, y no oíste mi voz, dice Jehová.


Soy inocente, de cierto su ira se apartó de mí. He aquí yo entraré en juicio contigo, porque dijiste: No he pecado.


¿Cómo puedes decir: No soy inmunda, nunca anduve tras los baales? Mira tu proceder en el valle, conoce lo que has hecho, dromedaria ligera que tuerce su camino,


El proceder de la mujer adúltera es así: Come, y limpia su boca Y dice: No he hecho maldad.


¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas.


Si encubrí como hombre mis transgresiones, Escondiendo en mi seno mi iniquidad,


Entonces les dijo: Vosotros sois los que os justificáis a vosotros mismos delante de los hombres; mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es abominación.


¿No es Efraín hijo precioso para mí? ¿no es niño en quien me deleito? pues desde que hablé de él, me he acordado de él constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él; ciertamente tendré de él misericordia, dice Jehová.


Cuando pecare en alguna de estas cosas, confesará aquello en que pecó,


Y David dijo a Jehová, cuando vio al ángel que destruía al pueblo: Yo pequé, yo hice la maldad; ¿qué hicieron estas ovejas? Te ruego que tu mano se vuelva contra mí, y contra la casa de mi padre.


Y perdonarás a tu pueblo que había pecado contra ti, y todas sus infracciones con que se hayan rebelado contra ti, y harás que tengan de ellos misericordia los que los hubieren llevado cautivos;


toda oración y todo ruego que hiciere cualquier hombre, o todo tu pueblo Israel, cualquiera que conociere su llaga y su dolor en su corazón, si extendiere sus manos hacia esta casa,


Ahora, pues, dad gloria a Jehová Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras.


Mírame, y ten misericordia de mí, Porque estoy solo y afligido.


Mira mi aflicción y mi trabajo, Y perdona todos mis pecados.


Porque mis enemigos están vivos y fuertes, Y se han aumentado los que me aborrecen sin causa.


He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, Y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម