Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 131:1 - Biblia Reina Valera 1960

1 Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se enaltecieron; Ni anduve en grandezas, Ni en cosas demasiado sublimes para mí.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Señor, mi corazón no es orgulloso; mis ojos no son altivos. No me intereso en cuestiones demasiado grandes o impresionantes que no puedo asimilar.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Señor, mi corazón no es engreído ni mis ojos altaneros: no he tomado un camino de grandezas ni de prodigios que me superaran.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

1 Cántico gradual. De David Oh YHVH, mi corazón no se ha ensoberbecido ni mis ojos se han enaltecido; No he andado en pos de grandezas, ni en cosas demasiado sublimes para mí.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Canto gradual. De David. Mi corazón, Señor, no es altanero, ni mis ojos altivos. No voy tras lo grandioso, ni tras lo prodigioso, que me excede,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

1 Cántico gradual: de David Jehová, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se han enaltecido; ni anduve en grandezas, ni en cosas demasiado sublimes para mí.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 131:1
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Unánimes entre vosotros; no altivos, sino asociándoos con los humildes. No seáis sabios en vuestra propia opinión.


Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender.


¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Por tanto, yo hablaba lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía.


¿Y tú buscas para ti grandezas? No las busques; porque he aquí que yo traigo mal sobre toda carne, ha dicho Jehová; pero a ti te daré tu vida por botín en todos los lugares adonde fueres.


Al que solapadamente infama a su prójimo, yo lo destruiré; No sufriré al de ojos altaneros y de corazón vanidoso.


A no haber estado Jehová por nosotros, Diga ahora Israel;


Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.


Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra.


Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;


¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!


Los criados de Saúl hablaron estas palabras a los oídos de David. Y David dijo: ¿Os parece a vosotros que es poco ser yerno del rey, siendo yo un hombre pobre y de ninguna estima?


Y Saúl envió a decir a Isaí: Yo te ruego que esté David conmigo, pues ha hallado gracia en mis ojos.


Entonces uno de los criados respondió diciendo: He aquí yo he visto a un hijo de Isaí de Belén, que sabe tocar, y es valiente y vigoroso y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso, y Jehová está con él.


Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio de sus hermanos; y desde aquel día en adelante el Espíritu de Jehová vino sobre David. Se levantó luego Samuel, y se volvió a Ramá.


para que no se eleve su corazón sobre sus hermanos, ni se aparte del mandamiento a diestra ni a siniestra; a fin de que prolongue sus días en su reino, él y sus hijos, en medio de Israel.


¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!


sirviendo al Señor con toda humildad, y con muchas lágrimas, y pruebas que me han venido por las asechanzas de los judíos;


Mas yo no he ido en pos de ti para incitarte a su castigo, ni deseé día de calamidad, tú lo sabes. Lo que de mi boca ha salido, fue en tu presencia.


Pero David había ido y vuelto, dejando a Saúl, para apacentar las ovejas de su padre en Belén.


Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes;


Y aun me haré más vil que esta vez, y seré bajo a tus ojos; pero seré honrado delante de las criadas de quienes has hablado.


Altivez de ojos, y orgullo de corazón, Y pensamiento de impíos, son pecado.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម