Salmos 123:2 - Biblia Reina Valera 1960

² He aquí, como los ojos de los siervos miran a la mano de sus señores, Y como los ojos de la sierva a la mano de su señora, Así nuestros ojos miran a Jehová nuestro Dios, Hasta que tenga misericordia de nosotros.

កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Seguimos buscando la misericordia del Señor nuestro Dios, así como los sirvientes fijan los ojos en su amo y la esclava observa a su ama, atenta al más mínimo gesto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² Como los ojos de los siervos se fijan en la mano de su dueño, como miran los ojos de una esclava la mano de su dueña, así miran nuestros ojos al Señor, nuestro Dios, ¿cuándo tendrá piedad de nosotros?

La Biblia Textual 3a Edicion

² He aquí, como los ojos de los siervos miran la mano de sus señores, Y los ojos de la sierva la mano de su señora, Así nuestros ojos miran a YHVH nuestro Dios, Hasta que tenga misericordia de nosotros.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² Igual que ojos de siervo hacia la mano del Señor, como los ojos de la esclava hacia la mano de su dueña, así nuestros ojos hacia el Señor Dios nuestro, hasta que él tenga piedad.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

² He aquí, como los ojos de los siervos miran a la mano de sus señores, y como los ojos de la sierva a la mano de su señora; así nuestros ojos miran a Jehová nuestro Dios; hasta que tenga misericordia de nosotros.

Salmos 123:2 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Salmos 25:15

Mis ojos están siempre hacia Jehová, Porque él sacará mis pies de la red.

Génesis 49:18

Tu salvación esperé, oh Jehová.

Lucas 18:1

También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar,

Génesis 32:26

Y dijo: Déjame, porque raya el alba. Y Jacob le respondió: No te dejaré, si no me bendices.

Salmos 119:82

Desfallecieron mis ojos por tu palabra, Diciendo: ¿Cuándo me consolarás?

Josué 10:6

Entonces los moradores de Gabaón enviaron a decir a Josué al campamento en Gilgal: No niegues ayuda a tus siervos; sube prontamente a nosotros para defendernos y ayudarnos; porque todos los reyes de los amorreos que habitan en las montañas se han unido contra nosotros.

Josué 9:27

Y Josué los destinó aquel día a ser leñadores y aguadores para la congregación, y para el altar de Jehová en el lugar que Jehová eligiese, lo que son hasta hoy.

Josué 9:23

Ahora, pues, malditos sois, y no dejará de haber de entre vosotros siervos, y quien corte la leña y saque el agua para la casa de mi Dios.

1 Reyes 1:20

Entre tanto, rey señor mío, los ojos de todo Israel están puestos en ti, para que les declares quién se ha de sentar en el trono de mi señor el rey después de él.

2 Crónicas 20:12

¡Oh Dios nuestro! ¿no los juzgarás tú? Porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos.