Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Jueces 19:8 - Biblia Reina Valera 1960

8 Al quinto día, levantándose de mañana para irse, le dijo el padre de la joven: Conforta ahora tu corazón, y aguarda hasta que decline el día. Y comieron ambos juntos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 A la mañana del quinto día, el hombre se levantó temprano nuevamente, listo para partir, pero una vez más el padre de la joven le dijo: «Come algo; después podrás irte esta tarde». Así que se pasaron otro día de festejo.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Al quinto día, como se levantara muy temprano para irse, el padre de la joven le dijo: 'Repón tus fuerzas, espera la caída de la tarde'. Comieron los dos juntos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Al quinto día madrugó y se dispuso a partir, pero el padre de la joven le dijo: Te ruego que confortes tu corazón, y esperes hasta que el día decline. Y ambos comieron juntos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Al quinto día se levantó de madrugada para partir; pero el padre de la joven le dijo: 'Reconforta, por favor, tu corazón'. Así aguardaron hasta el declinar del día y comieron juntos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

8 Y al quinto día levantándose de mañana para irse, le dijo el padre de la joven: Te ruego que confortes ahora tu corazón. Y se detuvieron hasta que ya declinaba el día, y comieron ambos juntos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Jueces 19:8
4 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Al cuarto día, cuando se levantaron de mañana, se levantó también el levita para irse; y el padre de la joven dijo a su yerno: Conforta tu corazón con un bocado de pan, y después os iréis.


Y se levantó el varón para irse, pero insistió su suegro, y volvió a pasar allí la noche.


Luego se levantó el varón para irse, él y su concubina y su criado. Entonces su suegro, el padre de la joven, le dijo: He aquí ya el día declina para anochecer, te ruego que paséis aquí la noche; he aquí que el día se acaba, duerme aquí, para que se alegre tu corazón; y mañana os levantaréis temprano a vuestro camino y te irás a tu casa.


Y el vino que alegra el corazón del hombre, El aceite que hace brillar el rostro, Y el pan que sustenta la vida del hombre.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម