Jeremías 4:1 - Biblia Reina Valera 19601 Si te volvieres, oh Israel, dice Jehová, vuélvete a mí. Y si quitares de delante de mí tus abominaciones, y no anduvieres de acá para allá, សូមមើលជំពូកកំណែច្រើនទៀតBiblia Nueva Traducción Viviente1 «¡Oh, Israel! —dice el Señor—, si quisieras, podrías volver a mí. Podrías desechar tus ídolos detestables y no alejarte nunca más. សូមមើលជំពូកBiblia Católica (Latinoamericana)1 Si tú quieres volver, oh Israel, dice Yavé, si quieres convertirte a mí, si alejas de mi vista tus sucios ídolos, ya no tendrás más que esconderte de mí. សូមមើលជំពូកLa Biblia Textual 3a Edicion1 Oráculo de YHVH: Cuando quieras volver,° oh Israel, vuélvete a mí. Si apartas de mí tus ídolos detestables, Ya no vagarás de una parte a otra.° សូមមើលជំពូកBiblia Serafín de Ausejo 19751 Si te conviertes, Israel -oráculo de Yahveh-, puedes volver a mí. Si quitas tus abominaciones, no tienes por qué huir de mi presencia. សូមមើលជំពូកBiblia Reina Valera Gómez (2023)1 Si te has de convertir, oh Israel, dice Jehová, conviértete a mí; y si quitares tus abominaciones de delante de mí, no andarás de acá para allá. សូមមើលជំពូក |
Cuando oyó Asa las palabras y la profecía del profeta Azarías hijo de Obed, cobró ánimo, y quitó los ídolos abominables de toda la tierra de Judá y de Benjamín, y de las ciudades que él había tomado en la parte montañosa de Efraín; y reparó el altar de Jehová que estaba delante del pórtico de Jehová.
Asimismo profanó el rey los lugares altos que estaban delante de Jerusalén, a la mano derecha del monte de la destrucción, los cuales Salomón rey de Israel había edificado a Astoret ídolo abominable de los sidonios, a Quemos ídolo abominable de Moab, y a Milcom ídolo abominable de los hijos de Amón.
Y envié a vosotros todos mis siervos los profetas, desde temprano y sin cesar, para deciros: Volveos ahora cada uno de vuestro mal camino, y enmendad vuestras obras, y no vayáis tras dioses ajenos para servirles, y viviréis en la tierra que di a vosotros y a vuestros padres; mas no inclinasteis vuestro oído, ni me oísteis.