Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Génesis 3:6 - Biblia Reina Valera 1960

6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 La mujer quedó convencida. Vio que el árbol era hermoso y su fruto parecía delicioso, y quiso la sabiduría que le daría. Así que tomó del fruto y lo comió. Después le dio un poco a su esposo que estaba con ella, y él también comió.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 A la mujer le gustó ese árbol que atraía la vista y que era tan excelente para alcanzar el conocimiento. Tomó de su fruto y se lo comió y le dio también a su marido que andaba con ella, quien también lo comió.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Así, vio la mujer que el árbol era bueno para comer,° y que era agradable a los ojos, y que era el árbol deseado para alcanzar conocimiento. Y tomó de su fruto y comió, y dio también a su marido, que estaba con ella, y él comió.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Vio la mujer que el árbol tenía frutos sabrosos y que era seductor a la vista y codiciable para conseguir sabiduría; tomó de sus frutos y comió, y dio también a su marido, que estaba con ella. Y también él comió.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 Y cuando la mujer vio que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar sabiduría, tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido y él comió con ella.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Génesis 3:6
19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.


y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión.


Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa.


Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.


Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto; allí prevaricaron contra mí.


que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas.


Y tú, hijo de hombre, el día que yo arrebate a ellos su fortaleza, el gozo de su gloria, el deleite de sus ojos y el anhelo de sus almas, y también sus hijos y sus hijas,


Hijo de hombre, he aquí que yo te quito de golpe el deleite de tus ojos; no endeches, ni llores, ni corran tus lágrimas.


Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.


Di a la casa de Israel: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo profano mi santuario, la gloria de vuestro poderío, el deseo de vuestros ojos y el deleite de vuestra alma; y vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis caerán a espada.


Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo.


Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.


Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí.


Hice pacto con mis ojos; ¿Cómo, pues, había yo de mirar a una virgen?


Y ella lloró en presencia de él los siete días que ellos tuvieron banquete; mas al séptimo día él se lo declaró, porque le presionaba; y ella lo declaró a los hijos de su pueblo.


Entonces volvió con él, y comió pan en su casa, y bebió agua.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម