Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Efesios 6:18 - Biblia Reina Valera 1960

18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

18 Oren en el Espíritu en todo momento y en toda ocasión. Manténganse alerta y sean persistentes en sus oraciones por todos los creyentes en todas partes.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

18 Vivan orando y suplicando. Oren en todo tiempo según les inspire el Espíritu. Velen en común y perseveren en sus oraciones sin desanimarse nunca, intercediendo en favor de todos los santos, sus hermanos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

18 Orad siempre en el Espíritu mediante toda oración y súplica, velando también para ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

18 Con toda clase de oraciones y súplicas, orad en toda ocasión en el Espíritu, y velad juntos y con perseverancia, intercediendo por todo el pueblo santo,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

18 orando en todo tiempo, con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Efesios 6:18
51 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias;


Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.


Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres;


Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo,


Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.


Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.


Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.


Aún estaba hablando y orando, y confesando mi pecado y el pecado de mi pueblo Israel, y derramaba mi ruego delante de Jehová mi Dios por el monte santo de mi Dios;


no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones,


Jehová ha oído mi ruego; Ha recibido Jehová mi oración.


gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración;


Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo.


Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración.


Todos estos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.


y les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos, y orad para que no entréis en tentación.


Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia. Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar; Ten misericordia de mí, y oye mi oración.


Y Cristo, en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente.


Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día;


siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros,


Estén, pues, atentos tus ojos a la oración de tu siervo y a la plegaria de tu pueblo Israel, para oírlos en todo aquello por lo cual te invocaren;


Y le dijo Jehová: Yo he oído tu oración y tu ruego que has hecho en mi presencia. Yo he santificado esta casa que tú has edificado, para poner mi nombre en ella para siempre; y en ella estarán mis ojos y mi corazón todos los días.


Cuando acabó Salomón de hacer a Jehová toda esta oración y súplica, se levantó de estar de rodillas delante del altar de Jehová con sus manos extendidas al cielo;


y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,


Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él.


Venció al ángel, y prevaleció; lloró, y le rogó; en Bet-el le halló, y allí habló con nosotros.


Cuando Daniel supo que el edicto había sido firmado, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cámara que daban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes.


Jehová, en la tribulación te buscaron; derramaron oración cuando los castigaste.


Y estas mis palabras con que he orado delante de Jehová, estén cerca de Jehová nuestro Dios de día y de noche, para que él proteja la causa de su siervo y de su pueblo Israel, cada cosa en su tiempo;


porque oigo del amor y de la fe que tienes hacia el Señor Jesús, y para con todos los santos;


Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.


¿Se deleitará en el Omnipotente? ¿Invocará a Dios en todo tiempo?


Le dio también la copia del decreto que había sido dado en Susa para que fuesen destruidos, a fin de que la mostrase a Ester y se lo declarase, y le encargara que fuese ante el rey a suplicarle y a interceder delante de él por su pueblo.


piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, y que hacía muchas limosnas al pueblo, y oraba a Dios siempre.


Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra.


seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,


A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo,


Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!


en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.


hijo de Matusalén, hijo de Enoc, hijo de Jared, hijo de Mahalaleel, hijo de Cainán,


habiendo oído de vuestra fe en Cristo Jesús, y del amor que tenéis a todos los santos,


Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre!


hijo de Maat, hijo de Matatías, hijo de Semei, hijo de José, hijo de Judá,


Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo,


Mientras ella oraba largamente delante de Jehová, Elí estaba observando la boca de ella.


Pero este género no sale sino con oración y ayuno.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម