Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





1 Samuel 28:21 - Biblia Reina Valera 1960

21 Entonces la mujer vino a Saúl, y viéndolo turbado en gran manera, le dijo: He aquí que tu sierva ha obedecido a tu voz, y he arriesgado mi vida, y he oído las palabras que tú me has dicho.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Nueva Traducción Viviente

21 Cuando la mujer lo vio tan deshecho, le dijo: —Señor, obedecí sus órdenes a riesgo de mi vida.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

21 Al verlo tan abatido, la mujer se acercó a Saúl y le dijo: 'Tu sirvienta te obedeció, arriesgué mi vida por hacer lo que me pedías.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

21 Y la mujer se acercó a Saúl, y vio que estaba muy agitado y le dijo: He aquí tu sierva ha obedecido tu voz, y puse mi vida en la palma de mi mano, y obedecí las palabras que tú me hablaste.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

21 Acercóse la mujer a Saúl y, al ver que estaba tan conturbado, le dijo: 'Mira que tu sierva ha obedecido tu voz y que he expuesto mi vida por atender las palabras que me dirigiste.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

21 Entonces la mujer vino a Saúl, y viéndole en grande manera turbado, le dijo: He aquí que tu sierva ha obedecido a tu voz, y he puesto mi vida en mi mano, y he oído las palabras que tú me has dicho.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




1 Samuel 28:21
6 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Viendo, pues, que no me defendíais, arriesgué mi vida, y pasé contra los hijos de Amón, y Jehová me los entregó; ¿por qué, pues, habéis subido hoy contra mí para pelear conmigo?


¿Por qué quitaré yo mi carne con mis dientes, Y tomaré mi vida en mi mano?


pues él tomó su vida en su mano, y mató al filisteo, y Jehová dio gran salvación a todo Israel. Tú lo viste, y te alegraste; ¿por qué, pues, pecarás contra la sangre inocente, matando a David sin causa?


Entonces Saúl cayó en tierra cuan grande era, y tuvo gran temor por las palabras de Samuel; y estaba sin fuerzas, porque en todo aquel día y aquella noche no había comido pan.


Te ruego, pues, que tú también oigas la voz de tu sierva; pondré yo delante de ti un bocado de pan para que comas, a fin de que cobres fuerzas, y sigas tu camino.


Y el corazón del rey de Siria se turbó por esto; y llamando a sus siervos, les dijo: ¿No me declararéis vosotros quién de los nuestros es del rey de Israel?


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម