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Santiago 4:6 - Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Y él da gracia con generosidad. Como dicen las Escrituras: «Dios se opone a los orgullosos pero da gracia a los humildes».

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Biblia Reina Valera 1960

6 Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 pero Dios tiene mejores cosas que dar. Y la Escritura añade: Dios resiste a los orgullosos, pero hace favores a los humildes.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Pero da° mayor gracia, por lo cual dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Pero él da una gracia mayor. Por eso dice: Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

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Santiago 4:6
34 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

pero aquellos que se exaltan a sí mismos serán humillados, y los que se humillan a sí mismos serán exaltados.


El Señor se burla de los burlones, pero muestra su bondad a los humildes.


Del mismo modo, ustedes los más jóvenes tienen que aceptar la autoridad de los ancianos; y todos vístanse con humildad en su trato los unos con los otros, porque «Dios se opone a los orgullosos pero da gracia a los humildes».


La arrogancia va delante de la destrucción; la humildad precede al honor.


Aunque el Señor es grande, se ocupa de los humildes, pero se mantiene distante de los orgullosos.


El orgullo termina en humillación, mientras que la humildad trae honra.


La verdadera humildad y el temor del Señor conducen a riquezas, a honor y a una larga vida.


Pues aquellos que se exaltan a sí mismos serán humillados, y los que se humillan a sí mismos serán exaltados».


El orgullo humano será humillado, y la arrogancia humana será rebajada. Solo el Señor será enaltecido en aquel día de juicio.


Si la gente tiene problemas y tú dices: “Ayúdalos”, Dios los salvará.


Les digo que fue este pecador —y no el fariseo— quien regresó a su casa justificado delante de Dios. Pues los que se exaltan a sí mismos serán humillados, y los que se humillan serán exaltados».


»Ahora, yo, Nabucodonosor, alabo, glorifico y doy honra al Rey del cielo. Todos sus actos son justos y verdaderos, y es capaz de humillar al soberbio».


El Alto y Majestuoso que vive en la eternidad, el Santo, dice: «Yo vivo en el lugar alto y santo con los de espíritu arrepentido y humilde. Restauro el espíritu destrozado del humilde y reavivo el valor de los que tienen un corazón arrepentido.


A príncipes derrocó de sus tronos y exaltó a los humildes.


El temor del Señor enseña sabiduría; la humildad precede a la honra.


pero cuando estaba sumido en profunda angustia, Manasés buscó al Señor su Dios y se humilló con sinceridad ante el Dios de sus antepasados.


»¡Dejen de ser tan orgullosos y altaneros! ¡No hablen con tanta arrogancia! Pues el Señor es un Dios que sabe lo que han hecho; él juzgará sus acciones.


‘Estabas apenado y te humillaste ante Dios al oír las palabras que él pronunció contra la ciudad y sus habitantes. Te humillaste, rasgaste tu ropa en señal de desesperación y lloraste delante de mí, arrepentido. Ciertamente te escuché, dice el Señor.


Entonces Ezequías se humilló y se arrepintió de su soberbia, junto con el pueblo de Jerusalén. De modo que el enojo del Señor no cayó sobre ellos durante la vida de Ezequías.


A los que escuchan mis enseñanzas se les dará más comprensión, y tendrán conocimiento en abundancia; pero a los que no escuchan se les quitará aun lo poco que entiendan.


pero a diferencia de su padre, no se humilló ante el Señor, sino que Amón pecó aún más.


Ahora sé que el Señor es más grande que todos los demás dioses, porque rescató a su pueblo de la opresión de los egipcios arrogantes».


Por un breve instante te abandoné, pero con gran compasión te recibiré de nuevo.


Pues el vengador de los que son asesinados cuida de los indefensos; no pasa por alto el clamor de los que sufren.


La oración de Manasés, el relato de la forma en que Dios le respondió, y el relato de todos sus pecados y su infidelidad están escritos en El registro de los videntes. Incluye una lista de los sitios donde, antes de que se humillara y se arrepintiera, construyó santuarios paganos y levantó ídolos y postes dedicados a la diosa Asera.


Humíllense delante del Señor, y él los levantará con honor.


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