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Salmos 46:8 - Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Vengan, vean las obras gloriosas del Señor: miren cómo trae destrucción sobre el mundo.

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Biblia Reina Valera 1960

8 Venid, ved las obras de Jehová, Que ha puesto asolamientos en la tierra.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Vengan a ver las hazañas del Señor, y los estragos que causó a la tierra.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 Venid, contemplad las obras de YHVH, Que puso asolamientos en la tierra,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Con nosotros el Señor de los ejércitos, el Dios de Jacob es nuestra fortaleza.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

8 Venid, ved las obras de Jehová, que ha puesto asolamientos en la tierra.

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Salmos 46:8
18 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Vengan y vean lo que nuestro Dios ha hecho, ¡los imponentes milagros que realiza a favor de la gente!


¡Miren! El Señor está a punto de destruir la tierra y convertirla en una inmensa tierra baldía. Él devasta la superficie de la tierra y dispersa a los habitantes.


Reconstruirán las ruinas antiguas, reparando ciudades destruidas hace mucho tiempo. Las resucitarán, aunque hayan estado desiertas por muchas generaciones.


Entonces el faraón, sus funcionarios y todo el pueblo de Egipto se despertaron durante la noche, y se oyó un lamento desgarrador por toda la tierra de Egipto. No había ni una sola casa donde alguien no hubiera muerto.


porque el Señor les endureció el corazón y los hizo pelear contra los israelitas. Así que fueron totalmente destruidos sin compasión, tal como el Señor le había ordenado a Moisés.


Ninguna maldición puede tocar a Jacob; ninguna magia ejerce poder alguno contra Israel. Pues ahora se dirá de Jacob: “¡Qué maravillas ha hecho Dios por Israel!”.


Esta vez los funcionarios del faraón se le acercaron y le suplicaron: «¿Hasta cuándo permitirás que este hombre nos tenga como rehenes? ¡Deja que los hombres se vayan a adorar al Señor su Dios! ¿Acaso no te das cuenta de que Egipto está en ruinas?».


No se rebelen contra el Señor y no teman al pueblo de esa tierra. ¡Para nosotros son como presa indefensa! ¡Ellos no tienen protección, pero el Señor está con nosotros! ¡No les tengan miedo!».


»Cuando salgas a luchar contra tus enemigos y te enfrentes con caballos y carros de guerra y con un ejército más numeroso que el tuyo, no tengas miedo. ¡El Señor tu Dios, quien te sacó de la tierra de Egipto, está contigo!


En su amor inagotable, mi Dios estará a mi lado y me dejará mirar triunfante a todos mis enemigos.


Pero felices son los que tienen como ayudador al Dios de Israel, los que han puesto su esperanza en el Señor su Dios.


Muy bien, el Señor mismo les dará la señal. ¡Miren! ¡La virgen concebirá un niño! Dará a luz un hijo y lo llamarán Emanuel (que significa “Dios está con nosotros”).


Convoquen a sus asambleas de guerra, pero no les servirán de nada; desarrollen sus estrategias, pero no tendrán éxito, ¡porque Dios está con nosotros!».


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