Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 123:3 - Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Ten misericordia de nosotros, Señor, ten misericordia, porque ya estamos hartos de tanto desprecio.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

3 Ten misericordia de nosotros, oh Jehová, ten misericordia de nosotros, Porque estamos muy hastiados de menosprecio.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Ten piedad de nosotros, Señor, ten piedad, porque estamos saturados de desprecios.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

3 ¡Ten misericordia de nosotros, oh YHVH! ¡Ten misericordia de nosotros! Porque estamos saturados de desprecios;

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Ten piedad, oh Señor, ten piedad de nosotros, pues harto hemos tenido de desprecios.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

3 Ten misericordia de nosotros, oh Jehová, ten misericordia de nosotros; porque estamos muy hastiados de menosprecio.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 123:3
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

¡Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia! En ti busco protección. Me esconderé bajo la sombra de tus alas hasta que haya pasado el peligro.


Fue despreciado y rechazado: hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo. Nosotros le dimos la espalda y desviamos la mirada; fue despreciado, y no nos importó.


La multitud observaba, y los líderes se burlaban. «Salvó a otros —decían—, que se salve a sí mismo si de verdad es el Mesías de Dios, el Elegido».


Los fariseos, que amaban mucho su dinero, oyeron todo eso y se burlaron de Jesús.


Respóndeme cuando clamo a ti, oh Dios, tú que me declaras inocente. Libérame de mis problemas; ten misericordia de mí y escucha mi oración.


Entonces, cuando el arca del Señor entraba a la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, se asomó por la ventana. Cuando vio que el rey David saltaba y danzaba ante el Señor, se llenó de desprecio hacia él.


Ellos le dijeron: «El rey Ezequías dice: “Hoy es un día de dificultad, insulto y deshonra. Es como cuando un niño está a punto de nacer, pero la madre no tiene fuerzas para dar a luz.


Mis sirvientes y mis criadas me consideran un extraño; para ellos soy como un extranjero.


Que vuelvan la otra mejilla a aquellos que los golpean y que acepten los insultos de sus enemigos.


»Por lo tanto, profetiza a las colinas y a los montes, a los barrancos y a los valles de Israel. Esto dice el Señor Soberano: “Estoy furioso porque pasaron vergüenza ante las naciones vecinas.


No permitiré que oigas los insultos de las otras naciones y ellas dejarán de burlarse de ti. No serás una tierra que provoque la caída de su propia nación, dice el Señor Soberano”».


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម