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Salmos 119:31 - Biblia Nueva Traducción Viviente

31 Me aferro a tus leyes. Señor, ¡no dejes que pase vergüenza!

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Biblia Reina Valera 1960

31 Me he apegado a tus testimonios; Oh Jehová, no me avergüences.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

31 Me he apegado, Señor, a tus testimonios, que no me decepcione.

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La Biblia Textual 3a Edicion

31 Me he apegado a tus testimonios, ¡Oh YHVH, no permitas que sea avergonzado!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

31 yo me apego a tu enseñanza: no permitas, Señor, que me avergüence.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

31 Me he apegado a tus testimonios; oh Jehová, no me avergüences.

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Salmos 119:31
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor.


Jesús le dijo a la gente que creyó en él: —Ustedes son verdaderamente mis discípulos si se mantienen fieles a mis enseñanzas;


Cuando él llegó y vio las pruebas de la bendición de Dios, se llenó de alegría y alentó a los creyentes a que permanecieran fieles al Señor.


Adquiere la verdad y nunca la vendas; consigue también sabiduría, disciplina y buen juicio.


Pero el Señor salvará al pueblo de Israel con salvación eterna; por los siglos de los siglos, nunca más será humillado ni avergonzado.


Y ahora, queridos hijos, permanezcan en comunión con Cristo para que, cuando él regrese, estén llenos de valor y no se alejen de él avergonzados.


¡Protégeme! ¡Rescata mi vida de sus manos! No permitas que me avergüencen, pues yo en ti me refugio.


¡Confío en ti, mi Dios! No permitas que me avergüencen, ni dejes que mis enemigos se regodeen en mi derrota.


Haz que se avergüencen y se desalienten todos los que me persiguen, pero no dejes que sea yo el avergonzado y el desalentado. Haz que caiga sobre ellos un día de terror. ¡Sí, haz que caiga sobre ellos doble destrucción!


Reyes y reinas te servirán y atenderán a todas tus necesidades. Se inclinarán hasta el suelo ante ti y lamerán el polvo de tus pies. Entonces sabrás que yo soy el Señor. Los que confían en mí nunca serán avergonzados».


Lárguense de mi vida, ustedes los de mente malvada, porque tengo la intención de obedecer los mandatos de mi Dios.


Que sea intachable en guardar tus decretos; entonces nunca seré avergonzado.


Honro y amo tus mandatos; en tus decretos medito.


Entonces no tendré vergüenza cuando compare mi vida con tus mandatos.


»Asegúrate de obedecer todos los mandatos que te entrego. Demuéstrale amor al Señor tu Dios andando en sus caminos y aferrándote a él.


Tienes que temer al Señor tu Dios, adorarlo y aferrarte a él. Cuando hagas juramentos, que sean solo en su nombre.


Sin embargo, ustedes, todos los que fueron fieles al Señor su Dios, todavía siguen vivos; todos y cada uno de ustedes.


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