Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Salmos 119:18 - Biblia Nueva Traducción Viviente

18 Abre mis ojos, para que vea las verdades maravillosas que hay en tus enseñanzas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

18 Abre mis ojos, y miraré Las maravillas de tu ley.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

18 Abre mis ojos para que yo vea las maravillas de tu Ley.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

18 Abre mis ojos, Y contemplaré las maravillas de tu Ley.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

18 Destápame los ojos y que vea los misterios de tu ley.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

18 Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Salmos 119:18
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

para que les abras los ojos, a fin de que pasen de la oscuridad a la luz, y del poder de Satanás a Dios. Entonces recibirán el perdón de sus pecados y se les dará un lugar entre el pueblo de Dios, el cual es apartado por la fe en mí”.


Y cuando él venga, abrirá los ojos de los ciegos y destapará los oídos de los sordos.


Por eso uso estas parábolas: Pues ellos miran, pero en realidad no ven. Oyen, pero en realidad no escuchan ni entienden.


Entonces todo el que tenga ojos podrá ver la verdad, y todo el que tenga oídos podrá oírla.


En aquel día, los sordos oirán cuando se lean las palabras de un libro y los ciegos verán a través de la neblina y la oscuridad.


Entonces Jesús le dijo: —Yo entré en este mundo para hacer juicio, para dar vista a los ciegos y para demostrarles a los que creen que ven, que, en realidad, son ciegos.


Jesús respondió: —Bendito eres, Simón hijo de Juan, porque mi Padre que está en el cielo te lo ha revelado. No lo aprendiste de ningún ser humano.


Así que te aconsejo que de mí compres oro —un oro purificado por fuego— y entonces serás rico. Compra también ropas blancas de mí, así no tendrás vergüenza por tu desnudez, y compra ungüento para tus ojos, para que así puedas ver.


Ellos sirven dentro de un sistema de adoración que es solo una copia, una sombra del verdadero, que está en el cielo. Pues cuando Moisés estaba por construir el tabernáculo, Dios le advirtió lo siguiente: «Asegúrate de hacer todo según el modelo que te mostré aquí en la montaña».


Aun la perfección tiene sus límites, pero tus mandatos no tienen límite.


El sistema antiguo bajo la ley de Moisés era solo una sombra —un tenue anticipo de las cosas buenas por venir— no las cosas buenas en sí mismas. Bajo aquel sistema se repetían los sacrificios una y otra vez, año tras año, pero nunca pudieron limpiar por completo a quienes venían a adorar.


A pesar de que les di todas mis leyes, actúan como si esas leyes no se aplicaran a ellos.


—Señor —dijeron—, ¡queremos ver!


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម