Rut 2:10 - Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁰ Entonces Rut cayó a sus pies muy agradecida. —¿Qué he hecho para merecer tanta bondad? —le preguntó—. No soy más que una extranjera.

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁰ Ella entonces bajando su rostro se inclinó a tierra, y le dijo: ¿Por qué he hallado gracia en tus ojos para que me reconozcas, siendo yo extranjera?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁰ Al oír esto, Rut se inclinó profundamente hasta el suelo y le dijo: '¿Qué de bueno has visto en mí, una extranjera, para que me trates con tanta bondad?'

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁰ Ella entonces cayó sobre su rostro, se postró en tierra, y le dijo: ¿Por qué he hallado gracia ante tus ojos para que te fijes en mí, siendo yo una extranjera?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁰ Cayó ella rostro en tierra y, postrada, le dijo: '¿Por qué he encontrado favor a tus ojos y te interesas por mí, siendo yo extranjera?'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁰ Ella entonces bajando su rostro se inclinó a tierra, y le dijo: ¿Por qué he hallado gracia en tus ojos para que tú me reconozcas, siendo yo extranjera?

Rut 2:10 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

1 Samuel 25:23

Cuando Abigail vio a David, enseguida bajó de su burro y se inclinó ante él hasta el suelo.

Rut 2:13

—Espero continuar siendo de su agrado, señor —respondió ella—. Usted me consoló al hablarme con tanta bondad, aunque ni siquiera soy una de sus trabajadoras.

Romanos 12:10

Ámense unos a otros con un afecto genuino y deléitense al honrarse mutuamente.

Lucas 1:48

Pues se fijó en su humilde sierva, y de ahora en adelante todas las generaciones me llamarán bendita.

Lucas 1:43

¿Por qué tengo este honor, que la madre de mi Señor venga a visitarme?

2 Samuel 19:28

Todos mis parientes y yo solo podíamos esperar la muerte de su parte, mi señor, ¡pero en cambio me honró al permitirme comer a su propia mesa! ¿Qué más puedo pedir?

2 Samuel 9:8

Mefiboset se inclinó respetuosamente y exclamó: —¿Quién es su siervo para que le muestre tal bondad a un perro muerto como yo?

Mateo 25:35

Pues tuve hambre, y me alimentaron. Tuve sed, y me dieron de beber. Fui extranjero, y me invitaron a su hogar.

Rut 2:2

Un día Rut la moabita le dijo a Noemí: —Déjame ir a los campos de cosecha a ver si alguien en su bondad me permite recoger las espigas de grano dejadas atrás. Noemí respondió: —Está bien, hija mía, puedes ir.

Génesis 18:2

Entonces levantó la vista y vio a tres hombres de pie cerca de allí. Cuando los vio, corrió a recibirlos, y se inclinó hasta el suelo en señal de bienvenida.

Rut 2:9

Fíjate en qué parcela están cosechando y síguelas. Advertí a los hombres que no te traten mal. Y cuando tengas sed, sírvete del agua que hayan sacado del pozo.

Rut 2:11

—Sí, lo sé —respondió Booz—; pero también sé todo lo que has hecho por tu suegra desde la muerte de tu esposo. He oído que dejaste a tu padre y a tu madre, y a tu tierra natal, para vivir aquí entre gente totalmente desconocida.

Levítico 19:34

Trátalos como a israelitas de nacimiento, y ámalos como a ti mismo. Recuerda que una vez fuiste extranjero cuando vivías en Egipto. Yo soy el Señor tu Dios.

Rut 2:19

—¿Dónde recogiste todo este grano hoy? —preguntó Noemí—. ¿Dónde trabajaste? ¡Que el Señor bendiga al que te ayudó! Entonces Rut le contó a su suegra acerca del hombre en cuyo campo había trabajado. Le dijo: —El hombre con quien trabajé hoy se llama Booz.

2 Samuel 7:18

Entonces el rey David entró y se sentó delante del Señor y oró: «¿Quién soy yo, oh Señor Soberano, y qué es mi familia para que me hayas traído hasta aquí?