Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Romanos 4:16 - Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Así que la promesa se recibe por medio de la fe. Es un regalo inmerecido. Y, vivamos o no de acuerdo con la ley de Moisés, todos estamos seguros de recibir esta promesa si tenemos una fe como la de Abraham, quien es el padre de todos los que creen.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

16 Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Por eso la fe es el camino, y todo es don. De este modo la promesa de Abrahán queda asegurada para toda su raza, no sólo para sus hijos según la Ley, sino también para aquellos que por la fe son hijos suyos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Por eso, la promesa proviene de la fe, para que sea por gracia, a fin de que sea firme para toda la descendencia, no sólo para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros°

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Por eso la promesa es por la fe, para que lo sea como un don y quede asegurada para todos los descendientes, no sólo para los que proceden de la ley, sino también para los que proceden de la fe de Abrahán -que es padre de todos nosotros,

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

16 Por tanto, es por la fe, para que sea por gracia; a fin de que la promesa sea firme a toda simiente; no sólo al que es de la ley, sino también al que es de la fe de Abraham, quien es el padre de todos nosotros

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Romanos 4:16
18 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Dios los salvó por su gracia cuando creyeron. Ustedes no tienen ningún mérito en eso; es un regalo de Dios.


pero las Escrituras declaran que todos somos prisioneros del pecado, así que recibimos la promesa de libertad que Dios hizo únicamente por creer en Jesucristo.


Eso significa que no todos los descendientes naturales de Abraham son necesariamente hijos de Dios. Solo los hijos de la promesa son considerados hijos de Abraham;


Por su gracia él nos hizo justos a sus ojos y nos dio la seguridad de que vamos a heredar la vida eterna.


que, a pesar de que estábamos muertos por causa de nuestros pecados, nos dio vida cuando levantó a Cristo de los muertos. (¡Es solo por la gracia de Dios que ustedes han sido salvados!)


Recuerden que Cristo vino a servir a los judíos para demostrar que Dios es fiel a las promesas que les hizo a los antepasados de ellos.


Por lo tanto, ya que fuimos hechos justos a los ojos de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro Señor hizo por nosotros.


Sí, piensen en Abraham, su antepasado, y en Sara, que dio a luz a su nación. Cuando llamé a Abraham, era un solo hombre; pero, cuando lo bendije, se convirtió en una gran nación».


Así que, amados hermanos, esfuércense por comprobar si realmente forman parte de los que Dios ha llamado y elegido. Hagan estas cosas y nunca caerán.


La circuncisión era una señal de que Abraham ya tenía fe y de que Dios ya lo había aceptado y declarado justo aun antes de que fuera circuncidado. Por lo tanto, Abraham es el padre espiritual de los que tienen fe pero no han sido circuncidados. A ellos se les considera justos debido a su fe.


Jesús respondió: —La salvación ha venido hoy a esta casa, porque este hombre ha demostrado ser un verdadero hijo de Abraham.


Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso es verdad para todo el que cree, sea quien fuere.


Hay solo un Dios, y él hace justas a las personas —tanto a los judíos como a los gentiles— únicamente por medio de la fe.


Mediante Cristo Jesús, Dios bendijo a los gentiles con la misma bendición que le prometió a Abraham, a fin de que los creyentes pudiéramos recibir por medio de la fe al Espíritu Santo prometido.


Dios ha dado las promesas a Abraham y a su hijo. Y noten que la Escritura no dice «a sus hijos», como si significara muchos descendientes. Más bien, dice «a su hijo», y eso sin duda se refiere a Cristo.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម