Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Romanos 16:13 - Biblia Nueva Traducción Viviente

13 Saluden a Rufo, a quien el Señor eligió para hacerlo suyo; y también a su querida madre, quien ha sido como una madre para mí.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

13 Saludad a Rufo, escogido en el Señor, y a su madre y mía.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

13 Saluden a Rufo, elegido del Señor, y a su madre, que ha sido para mí como una segunda madre.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

13 Saludad a Rufo,° el escogido en el Señor, y a su madre, y mía.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 Saludad a Rufo, el elegido en el Señor, y a su madre, que también lo es mía.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

13 Saludad a Rufo, escogido en el Señor, y a su madre y mía.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Romanos 16:13
12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Yo, Juan, el anciano, les escribo esta carta a la señora elegida y a sus hijos, a quienes amo en la verdad —y no solo yo sino también todos los que conocen la verdad—,


Trata a las mujeres mayores como lo harías con tu madre y trata a las jóvenes como a tus propias hermanas, con toda pureza.


Un hombre llamado Simón, que pasaba por allí pero era de Cirene, venía del campo justo en ese momento, y los soldados lo obligaron a llevar la cruz de Jesús. (Simón era el padre de Alejandro y de Rufo).


Ustedes no me eligieron a mí, yo los elegí a ustedes. Les encargué que vayan y produzcan frutos duraderos, así el Padre les dará todo lo que pidan en mi nombre.


En cuanto a nosotros, no podemos más que agradecerle a Dios por ustedes, queridos hermanos, amados por el Señor. Siempre estamos agradecidos de que Dios los eligió para que estén entre los primeros en experimentar la salvación, una salvación que vino mediante el Espíritu —quien los hace santos— y por creer en la verdad.


Incluso antes de haber hecho el mundo, Dios nos amó y nos eligió en Cristo para que seamos santos e intachables a sus ojos.


Y al discípulo le dijo: «Ahí tienes a tu madre». Y, a partir de entonces, ese discípulo la llevó a vivir a su casa.


Todo el que hace la voluntad de Dios es mi hermano y mi hermana y mi madre».


»Así que los que ahora son últimos, ese día serán los primeros, y los primeros serán los últimos.


Den mis saludos a Trifena y Trifosa, obreras del Señor, y a la amada Pérsida, quien ha trabajado tanto para el Señor.


Den mis saludos a Asíncrito, Flegonte, Hermas, Patrobas, Hermes y a los hermanos que se reúnen con ellos.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម