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Oseas 6:9 - Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Los sacerdotes forman bandas de asaltantes que esperan para emboscar a sus víctimas. Asesinan a los viajeros en el camino a Siquem y cometen toda clase de pecados.

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Biblia Reina Valera 1960

9 Y como ladrones que esperan a algún hombre, así una compañía de sacerdotes mata en el camino hacia Siquem; así cometieron abominación.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Como una banda de salteadores, los sacerdotes se juntan para asaltar a los que pasan por el camino de Siquem: lo que hacen es una vergüenza.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Como salteadores al acecho de un hombre, Así bandas de sacerdotes asesinan por el camino a Siquem, Cometiendo execrable maldad.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Como una emboscada de bandidos, así es la horda de los sacerdotes: asesinan en el camino de Siquén realmente es infame su conducta.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 Y como ladrones que acechan a un hombre, así una cuadrilla de sacerdotes, en consentimiento asesina en el camino; porque cometen vileza.

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Oseas 6:9
23 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

»Yo quiero sanar a Israel, pero sus pecados son demasiado grandes. Samaria está llena de mentirosos. ¡Hay ladrones adentro y bandidos afuera!


»Escuchen esto, ustedes sacerdotes. Presten atención, líderes de Israel. Escuchen, miembros de la familia real. Se ha pronunciado sentencia contra ustedes porque han llevado al pueblo a una trampa al rendirles culto a ídolos en Mizpa y en Tabor.


Entonces, los principales sacerdotes y los fariseos convocaron al Concilio Supremo. «¿Qué vamos a hacer? —se preguntaron unos a otros—. Sin duda, ese hombre realiza muchas señales milagrosas.


Faltaban dos días para la Pascua y el Festival de los Panes sin Levadura. Los principales sacerdotes y los maestros de la ley religiosa seguían buscando una oportunidad para capturar a Jesús en secreto y matarlo.


Sus líderes son como leones rugientes en cacería de sus víctimas. Sus jueces son como lobos voraces al anochecer, que para la mañana no han dejado rastro de su presa.


¡Escúchenme, líderes de Israel! Ustedes odian la justicia y tuercen todo lo recto.


Tus líderes son como lobos que despedazan a sus víctimas. ¡En realidad destruyen vidas a cambio de dinero!


Hay quienes acusan falsamente a otros y los envían a la muerte. Estás llena de gente que rinde culto a ídolos y hace cosas obscenas.


El Señor me habló una vez más y dijo: «Descubrí una conspiración contra mí entre los habitantes de Judá y Jerusalén.


El 19 de abril, levantamos el campamento junto al canal de Ahava y nos dirigimos a Jerusalén. La bondadosa mano de nuestro Dios nos protegió y nos salvó de enemigos y bandidos a lo largo del camino.


Jeroboam fortificó la ciudad de Siquem, en la región montañosa de Efraín, la que llegó a ser su capital. Tiempo después, también fortificó la ciudad de Peniel.


Cuando los creyentes oyeron las noticias, todos juntos alzaron sus voces en oración a Dios: «Oh Señor Soberano, Creador del cielo y de la tierra, del mar y de todo lo que hay en ellos,


Tus príncipes traman conspiraciones tal como los leones que acechan su presa. Devoran a los inocentes apoderándose de sus tesoros y quitándoles su riqueza mediante la extorsión; y dejan viudas a muchas mujeres del país.


De ese modo pondré fin a la lascivia y a la prostitución que trajiste de Egipto. Nunca más tus ojos anhelarán aquellas cosas ni recordarás con nostalgia tus días en Egipto.


La desnudaré por completo en público, a la vista de todos sus amantes. Nadie podrá librarla de mis manos.


Haces votos y los rompes; matas, robas y cometes adulterio. Hay violencia en todas partes: un asesinato tras otro.


Sí, ustedes cavaron un gran pozo para atraparlos en la arboleda de Acacias. Pero yo ajustaré cuentas con ustedes por lo que hicieron.


Abram atravesó la tierra hasta llegar a Siquem. Allí estableció el campamento, junto al roble de More. En aquel tiempo, los cananeos habitaban esa región.


La gente que sigue a Dios ha desaparecido; no queda ni una sola persona honrada sobre la tierra. Son todos asesinos; les tienden trampas hasta a sus propios hermanos.


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