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Números 7:9 - Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Pero a la división coatita no le entregó carretas ni bueyes, porque se les requería que hicieran el traslado de los objetos sagrados del tabernáculo sobre sus hombros.

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Biblia Reina Valera 1960

9 Pero a los hijos de Coat no les dio, porque llevaban sobre sí en los hombros el servicio del santuario.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Pero no dio ni buey ni carreta a los hijos de Quehat, porque estaban a cargo del servicio del santuario y llevaban su carga al hombro.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Pero a los hijos de Coat no les dio nada, porque tenían a su cargo el servicio del Santuario, que habían de transportar a hombros.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Pero no les dio ninguno a los queatitas, porque éstos debían llevar a hombros los objetos sagrados que tenían que transportar.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

9 Pero a los hijos de Coat no les dio nada; porque el servicio del santuario que pertenece a ellos era llevar las cargas sobre sus hombros.

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Números 7:9
9 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Como no fueron ustedes, los levitas, los que llevaban el arca la primera vez, el enojo del Señor nuestro Dios se encendió contra nosotros. No habíamos consultado a Dios acerca de cómo trasladarla de la manera apropiada».


Cuando los hombres que llevaban el arca del Señor dieron apenas seis pasos, David sacrificó un toro y un ternero engordado.


Estos cuatro clanes eran responsables de cuidar el arca, la mesa, el candelabro, los altares, los diferentes objetos utilizados en el santuario, la cortina interior y todos los accesorios relacionados con su uso.


Ahora los levitas no tendrán que transportar el tabernáculo y su mobiliario de un lugar a otro».


Luego David convocó a todo Israel a Jerusalén para trasladar el arca del Señor al lugar que él le había preparado.


Cuando llegaron al campo de trillar de Nacón, los bueyes tropezaron, y Uza extendió la mano para sujetar el arca de Dios.


Una vez que estaban presentes todos los ancianos de Israel, los sacerdotes levantaron el arca.


Así que pusieron el arca de Dios en una carreta nueva y la retiraron de la casa de Abinadab, que estaba en una colina. Uza y Ahío, hijos de Abinadab, guiaban la carreta


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