Números 17:12 - Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² Entonces el pueblo de Israel le dijo a Moisés: «¡Estamos perdidos! ¡Moriremos! ¡Estamos arruinados!

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Biblia Reina Valera 1960

¹² Entonces los hijos de Israel hablaron a Moisés, diciendo: He aquí nosotros somos muertos, perdidos somos, todos nosotros somos perdidos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² Aarón hizo como Moisés se lo había dicho, y corrió hacia la comunidad. El flagelo ya estaba azotando al pueblo. Aarón puso el incienso e hizo la expiación por el pueblo;'

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² Entonces los hijos de Israel clamaron a Moisés, diciendo: ¡He aquí perecemos! ¡Estamos perdidos! ¡Todos nosotros estamos perdidos!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² Aarón lo tomó, como se lo había ordenado Moisés, y corrió a la asamblea, cuando ya el azote había comenzado entre el pueblo. Pero él puso incienso e hizo expiación por el pueblo.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹² Y los hijos de Israel hablaron a Moisés, diciendo: He aquí nosotros somos muertos, perecemos, todos nosotros perecemos.

Números 17:12 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Hebreos 12:5

¿Acaso olvidaron las palabras de aliento con que Dios les habló a ustedes como a hijos? Él dijo: «Hijo mío, no tomes a la ligera la disciplina del Señor y no te des por vencido cuando te corrige.

Isaías 57:16

Pues no pelearé contra ustedes para siempre; no estaré siempre enojado. Si lo estuviera, moriría toda la gente, sí, todas las almas que he creado.

Isaías 6:5

Entonces dije: «¡Todo se ha acabado para mí! Estoy condenado, porque soy un pecador. Tengo labios impuros, y vivo en medio de un pueblo de labios impuros; sin embargo, he visto al Rey, el Señor de los Ejércitos Celestiales».

Proverbios 19:3

La gente arruina su vida por su propia necedad, y después se enoja con el Señor.

Salmos 90:7

Nos marchitamos bajo tu enojo; tu furia nos abruma.

Números 26:11

Sin embargo, los hijos de Coré no murieron ese día.

Números 17:11

Y Moisés hizo lo que el Señor le ordenó.

Números 25:13

por medio del cual doy a él y a sus descendientes el derecho perpetuo al sacerdocio. Pues en su celo por mí, su Dios, él purificó al pueblo de Israel, y los hizo justos ante mí».