Nehemías 8:3 - Biblia Nueva Traducción Viviente3 Se puso frente a la plaza, justo dentro de la entrada de la puerta del Agua, desde temprano por la mañana hasta el mediodía y leyó en voz alta a todos los que podían entender. Todo el pueblo escuchó atentamente la lectura del libro de la ley. សូមមើលជំពូកកំណែច្រើនទៀតBiblia Reina Valera 19603 Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley. សូមមើលជំពូកBiblia Católica (Latinoamericana)3 Estuvo leyendo el libro desde la mañana hasta el mediodía, frente a los hombres, mujeres y niños en edad de comprender que estaban reunidos en la plaza delante de la puerta de las Aguas. Todo el pueblo prestaba mucha atención al libro de la Ley. សូមមើលជំពូកLa Biblia Textual 3a Edicion3 Y delante de la plaza que está frente a la puerta de las Aguas, leyó en él desde el amanecer hasta el mediodía, en presencia de los hombres y de las mujeres que podían entender, y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al Rollo de la Ley. សូមមើលជំពូកBiblia Serafín de Ausejo 19753 Desde el alba hasta el mediodía, estuvo leyendo el libro en la plaza que hay delante de la puerta de las Aguas en presencia de los hombres, de las mujeres y de todos los que tenían uso de razón. Todo el pueblo tenía los oídos atentos al libro de la ley. សូមមើលជំពូកBiblia Reina Valera Gómez (2023)3 Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y entendidos; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley. សូមមើលជំពូក |
Por lo tanto, nunca dejamos de darle gracias a Dios de que cuando recibieron su mensaje de parte nuestra, ustedes no consideraron nuestras palabras como solo ideas humanas. Tomaron lo que dijimos como la misma palabra de Dios, la cual, por supuesto, lo es. Y esta palabra sigue actuando en ustedes los que creen.
Entonces fijaron una fecha, y ese día mucha gente llegó al lugar donde Pablo estaba alojado. Él explicó y dio testimonio acerca del reino de Dios y trató de convencerlos acerca de Jesús con las Escrituras. Usando la ley de Moisés y los libros de los profetas, les habló desde la mañana hasta la noche.
se unió a sus jefes y se comprometió mediante juramento. Juraron que caería una maldición sobre ellos mismos si dejaban de obedecer la ley de Dios dada por medio de su siervo Moisés. Prometieron solemnemente seguir al pie de la letra todos los mandatos, las ordenanzas y los decretos del Señor, nuestro Señor: