Lamentaciones 3:19 - Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁹ Recordar mi sufrimiento y no tener hogar es tan amargo que no encuentro palabras.

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Biblia Reina Valera 1960

¹⁹ Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel;

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁹ Acuérdate de mi miseria y mi vida errante, de mi ajenjo y amargor.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁹ z ¡Acuérdate de mi aflicción y mi miseria, del ajenjo y de la hiel!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁹ Zain. Recordar mi dolor y mi extravío es ajenjo y veneno.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁹ Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel.

Lamentaciones 3:19 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា

Lamentaciones 3:15

Él me llenó de amargura y me dio a beber una copa amarga de dolor.

Lamentaciones 3:5

Me sitió y me rodeó de angustia y aflicción.

Jeremías 9:15

Así que ahora esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: ¡mira!, los alimentaré con amargura y les daré veneno para beber.

Salmos 132:1

Señor, acuérdate de David y de todo lo que sufrió.

Salmos 89:50

¡Considera, Señor, cómo pasan vergüenza tus siervos! Llevo en mi corazón los insultos de mucha gente.

Salmos 89:47

Recuerda lo breve que es mi vida, ¡qué vacía e inútil es la existencia humana!

Job 7:7

Oh Dios, recuerda que mi vida es apenas un suspiro, y nunca más volveré a ser feliz.

Nehemías 9:32

»Ahora, Dios nuestro —Dios grande, poderoso y temible que cumple su pacto de amor inagotable—, no permitas que todas las privaciones que hemos sufrido te parezcan insignificantes. Grandes dificultades cayeron sobre nosotros, nuestros reyes, nuestros líderes, nuestros sacerdotes, nuestros profetas y nuestros antepasados —todo tu pueblo—, desde los días cuando los reyes de Asiria por primera vez nos vencieron hasta el día de hoy.

Jeremías 8:14

»Luego el pueblo dirá: “¿Por qué deberíamos esperar aquí para morir? Vengan, vayamos a las ciudades fortificadas para morir allí. Pues el Señor nuestro Dios ha decretado nuestra destrucción y nos ha dado a beber una copa de veneno porque pecamos contra el Señor.