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Juan 8:34 - Biblia Nueva Traducción Viviente

34 Jesús contestó: —Les digo la verdad, todo el que comete pecado es esclavo del pecado.

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Biblia Reina Valera 1960

34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

34 Jesús les contestó: 'En verdad, en verdad les digo: el que vive en el pecado es esclavo del pecado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo el que practica el pecado es esclavo del pecado.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

34 Jesús les contestó: 'De verdad os aseguro: todo el que comete el pecado, es esclavo del pecado.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo: Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

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Juan 8:34
16 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

¿No se dan cuenta de que uno se convierte en esclavo de todo lo que decide obedecer? Uno puede ser esclavo del pecado, lo cual lleva a la muerte, o puede decidir obedecer a Dios, lo cual lleva a una vida recta.


Prometen libertad, pero ellos mismos son esclavos del pecado y de la corrupción porque uno es esclavo de aquello que lo controla.


Un hombre malvado queda preso por sus propios pecados; son cuerdas que lo atrapan y no lo sueltan.


No permitan que el pecado controle la manera en que viven; no caigan ante los deseos pecaminosos.


Sabemos que nuestro antiguo ser pecaminoso fue crucificado con Cristo para que el pecado perdiera su poder en nuestra vida. Ya no somos esclavos del pecado.


En otro tiempo nosotros también éramos necios y desobedientes. Fuimos engañados y nos convertimos en esclavos de toda clase de pasiones y placeres. Nuestra vida estaba llena de maldad y envidia, y nos odiábamos unos a otros.


Vivían en pecado, igual que el resto de la gente, obedeciendo al diablo —el líder de los poderes del mundo invisible—, quien es el espíritu que actúa en el corazón de los que se niegan a obedecer a Dios.


¡Gracias a Dios! La respuesta está en Jesucristo nuestro Señor. Así que ya ven: en mi mente de verdad quiero obedecer la ley de Dios, pero a causa de mi naturaleza pecaminosa, soy esclavo del pecado.


(Nunca nadie se entregó tanto a hacer lo que es malo a los ojos del Señor como Acab, bajo la influencia de su esposa Jezabel.


la creación espera el día en que será liberada de la muerte y la descomposición, y se unirá a la gloria de los hijos de Dios.


Por lo tanto, el problema no es con la ley, porque la ley es buena y espiritual. El problema está en mí, porque soy demasiado humano, un esclavo del pecado.


porque puedo ver que estás lleno de una profunda envidia y que el pecado te tiene cautivo.


Jesús le respondió: —Te digo la verdad, a menos que nazcas de nuevo, no puedes ver el reino de Dios.


Les digo la verdad, hasta que desaparezcan el cielo y la tierra, no desaparecerá ni el más mínimo detalle de la ley de Dios hasta que su propósito se cumpla.


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