Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Job 14:12 - Biblia Nueva Traducción Viviente

12 así mismo la gente yace en la tumba y jamás se levanta. Hasta que los cielos dejen de existir, nadie despertará ni será perturbado de su sueño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

12 Así el hombre yace y no vuelve a levantarse; Hasta que no haya cielo, no despertarán, Ni se levantarán de su sueño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 el hombre, en cambio, no se levantará. Se gastarán los cielos antes que despierte, nunca saldrán los hombres de su sueño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

12 Así el hombre yace y no se levantará, Hasta que no haya cielos, no serán despertados, Ni serán levantados de su sueño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 pero el hombre que yace no se alzará más; pasarán los cielos y no despertará. ¡Nadie surgirá de su sueño!

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 Así el hombre yace, y no vuelve a levantarse; hasta que no haya cielos no despertarán, ni se levantarán de su sueño.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Job 14:12
26 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido y también el mar.


Si hubiera muerto al nacer, ahora descansaría en paz; estaría dormido y en reposo.


Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él. La tierra y el cielo huyeron de su presencia, pero no encontraron ningún lugar donde esconderse.


Por esa misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen han sido reservados para el fuego. Están guardados para el día del juicio, cuando será destruida la gente que vive sin Dios.


porque la luz hace todo visible. Por eso se dice: «Despiértate, tú que duermes; levántate de los muertos, y Cristo te dará luz».


Pues él debe permanecer en el cielo hasta el tiempo de la restauración final de todas las cosas, así como Dios lo prometió desde hace mucho mediante sus santos profetas.


El cielo y la tierra desaparecerán, pero mis palabras no desaparecerán jamás.


»¡Miren! Estoy creando cielos nuevos y una tierra nueva, y nadie volverá siquiera a pensar en los anteriores.


Levanten los ojos a los altos cielos y miren la tierra abajo. Pues los cielos desaparecerán como humo y la tierra se gastará como una prenda de vestir. Los habitantes de la tierra morirán como moscas, pero mi salvación permanece para siempre; mi reinado de justicia nunca tendrá fin.


Pero los que mueren en el Señor vivirán; ¡sus cuerpos se levantarán otra vez! Los que duermen en la tierra se levantarán y cantarán de alegría. Pues tu luz que da vida descenderá como el rocío sobre tu pueblo, en el lugar de los muertos.


Y sé que me envías a la muerte, el destino de todos los que viven.


Contra su propia voluntad, toda la creación quedó sujeta a la maldición de Dios. Sin embargo, con gran esperanza,


Se levantarán muchos de los que están muertos y enterrados, algunos para vida eterna y otros para vergüenza y deshonra eterna.


»Tan cierto como que mis cielos nuevos y mi tierra nueva permanecerán, así también ustedes serán mi pueblo para siempre, con un nombre que nunca desaparecerá —dice el Señor—.


Acuérdate de él antes de que tengas miedo de caerte y te preocupes de los peligros de la calle; antes de que el cabello se te ponga blanco como un almendro en flor y arrastres los pies sin energía como un saltamontes moribundo, y la alcaparra ya no estimule el deseo sexual. Acuérdate de él antes de que te falte poco para llegar a la tumba —tu hogar eterno— donde los que lamentan tu muerte llorarán en tu entierro.


Ellos dejarán de existir, pero tú permaneces para siempre; se desgastarán como ropa vieja. Tú los cambiarás y los desecharás como si fueran ropa.


¿Por qué mejor no perdonas mi pecado y me quitas la culpa? Pues pronto me acostaré en el polvo y allí moriré. Cuando me busques, me habré ido».


Arrasas a las personas como si fueran sueños que desaparecen. Son como la hierba que brota en la mañana.


Así como las nubes se disipan y se desvanecen, los que mueren ya no volverán.


Si alguien llega a la ancianidad, que disfrute de cada día de vida; pero que también recuerde que habrá muchos días oscuros. Todo lo que aún vendrá carece de sentido.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម