Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Jeremías 9:21 - Biblia Nueva Traducción Viviente

21 Pues la muerte se ha deslizado a través de nuestras ventanas y ha entrado a nuestras mansiones. Ha acabado con la flor de nuestra juventud: los niños ya no juegan en las calles, y los jóvenes ya no se reúnen en las plazas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

21 Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios, para exterminar a los niños de las calles, a los jóvenes de las plazas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

21 Los cadáveres humanos yacen como guano por el campo, como gavillas tras el segador, sin que haya nadie que los recoja.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

21 Porque la Muerte ha subido por nuestras ventanas, Ha entrado en nuestros palacios, Ha arrebatado al niño en la calle, Y a los muchachos en las plazas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

21 Caerá el cadáver del hombre, como estiércol en pleno campo y como gavilla detrás del segador, sin que haya quien lo recoja''.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

21 Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios; para exterminar a los niños de las calles y a los jóvenes de las plazas.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Jeremías 9:21
17 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Por eso ahora estoy lleno de la furia del Señor. ¡Sí, estoy cansado de contenerla! «Derramaré mi furia sobre los niños que juegan en las calles y sobre las reuniones de jóvenes, sobre esposos y esposas y sobre los que son viejos y canosos.


Te aventaré como el grano a las puertas de las ciudades y te quitaré tus hijos que tanto quieres. Destruiré a mi propio pueblo, porque rehusó cambiar sus malos caminos.


Entonces el Señor mandó al rey de Babilonia contra ellos. Los babilonios mataron a los hombres jóvenes de Judá, y los persiguieron incluso dentro del templo. No tuvieron compasión de la gente, y mataron tanto a los jóvenes como a las muchachas, a los ancianos y a los débiles. Dios los entregó a todos en manos de Nabucodonosor.


Hasta los jóvenes se debilitan y se cansan, y los hombres jóvenes caen exhaustos.


Por lo tanto, esto dice el Señor: «Pondré obstáculos en el camino de mi pueblo. Padres e hijos tropezarán contra ellos. Vecinos y amigos morirán juntos».


¡Así que deja que sus hijos se mueran de hambre! ¡Deja que mueran a espada! Que sus esposas se conviertan en viudas, sin hijos. ¡Que sus ancianos se mueran por una plaga y que sus jóvenes sean muertos en batalla!


»Ahora, el Señor Dios de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel, les pregunta: ¿por qué se destruyen ustedes mismos? Pues ninguno de ustedes sobrevivirá: ningún hombre, mujer o niño de entre ustedes que haya venido aquí desde Judá, ni siquiera los bebés que llevan en brazos.


Sus jóvenes caerán en las calles y morirán. Todos sus soldados serán matados», dice el Señor.


Irrumpen en la ciudad y corren a lo largo de sus muros. Se meten en todas las casas; como ladrones trepan por las ventanas.


(Si quedan diez hombres en una casa, todos morirán.


Los cadáveres de mi pueblo servirán de comida para los buitres y los animales salvajes, y no habrá quien los ahuyente.


Esparcirá los huesos sobre la tierra ante el sol, la luna y las estrellas: los dioses que mi pueblo ha amado, servido y rendido culto. Sus huesos no serán recogidos nuevamente ni enterrados, sino que serán esparcidos sobre la tierra como si fueran estiércol.


«¡La virgen Israel ha caído; nunca volverá a levantarse! Yace abandonada en el suelo y no hay quien la levante».


»Por haber pecado contra el Señor, los haré andar a tientas como el ciego. Su sangre será vertida en el polvo y sus cuerpos quedarán pudriéndose sobre la tierra».


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម