Biblia Todo Logo
ព្រះគម្ពីរតាមអ៊ីនធឺណិត

- ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម -





Isaías 30:28 - Biblia Nueva Traducción Viviente

28 Su ardiente aliento fluye como una inundación hasta el cuello de sus enemigos. Él zarandeará a las naciones soberbias para destrucción; les pondrá el freno en la boca y las llevará a la ruina.

សូមមើលជំពូក ចម្លង


កំណែច្រើនទៀត

Biblia Reina Valera 1960

28 Su aliento, cual torrente que inunda; llegará hasta el cuello, para zarandear a las naciones con criba de destrucción; y el freno estará en las quijadas de los pueblos, haciéndoles errar.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Católica (Latinoamericana)

28 Su respiración es como un torrente que se desborda y que le llega a uno hasta el cuello. El viene para colar a las naciones con un colador muy fino y a poner sus riendas con freno en el hocico de los pueblos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

La Biblia Textual 3a Edicion

28 Su resuello° es como un torrente que inunda, que alcanza hasta la garganta, Para zarandear las naciones con zarandeo funesto, Y poner brida de extravío en las quijadas de los pueblos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Serafín de Ausejo 1975

28 su aliento es cual torrente desbordado que alcanza hasta el cuello: para abalear a las naciones con el abaleo de la ruina, y poner un freno de extravío en las quijadas de los pueblos.

សូមមើលជំពូក ចម្លង

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

28 y su aliento, cual torrente desbordado: llegará hasta el cuello, para zarandear a las naciones con criba de destrucción; y el freno estará en las quijadas de los pueblos, haciéndoles errar.

សូមមើលជំពូក ចម្លង




Isaías 30:28
34 ការដាក់ឲ្យឆ្លើយតបគ្នា  

Por esa furia en mi contra y por tu arrogancia, que yo mismo oí, te pondré mi gancho en la nariz y mi freno en la boca. Te haré regresar por el mismo camino por donde viniste”».


Entonces el hombre de anarquía será dado a conocer, pero el Señor Jesús lo matará con el soplo de su boca y lo destruirá con el esplendor de su venida.


Hará justicia a los pobres y tomará decisiones imparciales con los que son explotados. La tierra temblará con la fuerza de su palabra, y bastará un soplo de su boca para destruir a los malvados.


y cubrirá a Judá hasta la barbilla. Extenderá sus alas y sumergirá a tu tierra de un extremo al otro, oh Emanuel.


Pues daré la orden y sacudiré a Israel junto con las demás naciones como se sacude el grano en un cernidor; sin embargo, ningún grano verdadero se perderá.


Por esa furia en mi contra y por tu arrogancia, que yo mismo oí, te pondré mi gancho en la nariz y mi freno en la boca. Te haré regresar por el mismo camino por donde viniste”».


»Simón, Simón, Satanás ha pedido zarandear a cada uno de ustedes como si fueran trigo;


Arrepiéntete de tu pecado, o de lo contrario, vendré a ti de repente y pelearé contra ellos con la espada de mi boca.


Tenía siete estrellas en la mano derecha, y una espada aguda de doble filo salía de su boca. Y la cara era semejante al sol cuando brilla en todo su esplendor.


Pues la palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra entre el alma y el espíritu, entre la articulación y la médula del hueso. Deja al descubierto nuestros pensamientos y deseos más íntimos.


Por lo tanto, Dios hará que ellos sean engañados en gran manera y creerán esas mentiras.


Está listo para separar el trigo de la paja con su rastrillo. Luego limpiará la zona donde se trilla y juntará el trigo en su granero, pero quemará la paja en un fuego interminable».


Por lo tanto, desaparecerán como la neblina de la mañana, como el rocío bajo el sol del amanecer, como paja llevada por el viento y como el humo de una chimenea.


yo, el Señor de los Ejércitos Celestiales, intervendré a tu favor con trueno, terremoto y gran ruido, con torbellino, tormenta y fuego consumidor.


Los egipcios se desanimarán, y yo confundiré sus planes. Rogarán a sus ídolos que les den sabiduría e invocarán a los espíritus, a médiums y a los que consultan los espíritus de los muertos.


Guía al caballo con el látigo, al burro con el freno, ¡y al necio con la vara en la espalda!


No seas como el mulo o el caballo, que no tienen entendimiento, que necesitan un freno y una brida para mantenerse controlados».


Luego, a tu orden, oh Señor, a la ráfaga de tu aliento, pudo verse el fondo del mar, y los cimientos de la tierra quedaron al descubierto.


porque Dios no le dio sabiduría ni le dio entendimiento.


Absalón y todos los hombres de Israel dijeron: «El consejo de Husai es mejor que el de Ahitofel». Pues el Señor había decidido frustrar el consejo de Ahitofel, que en realidad era un plan mejor, ¡para poder traer la calamidad sobre Absalón!


Pues el Señor enviará un poderoso ejército en su contra; como un potente granizo y una lluvia torrencial, se lanzarán sobre ella como las aguas embravecidas de una inundación y la aplastarán contra el suelo.


Se jactan diciendo: «Hemos hecho un trato para burlar a la muerte y hemos llegado a un acuerdo para evitar la tumba. La destrucción que se aproxima nunca podrá tocarnos, porque nos hemos edificado un fuerte refugio hecho de mentiras y engaños».


Sin embargo, el pueblo de Dios entonará una canción de alegría, como los cantos de los festivales sagrados. Estarás lleno de alegría, como cuando un flautista dirige a un grupo de peregrinos a Jerusalén, el monte del Señor, a la Roca de Israel.


Tofet, el lugar de incineración, hace tiempo que está preparado para el rey asirio; la pira tiene un gran montón de leña. El aliento del Señor, como fuego de volcán, la encenderá.


En el occidente, la gente respetará el nombre del Señor; en el oriente, lo glorificará. Pues él vendrá como una tempestuosa marea, impulsado por el aliento del Señor.


Señor, ¿por qué permitiste que nos apartáramos de tu camino? ¿Por qué nos diste un corazón terco para que dejáramos de temerte? Regresa y ayúdanos, porque somos tus siervos, las tribus que son tu posesión más preciada.


Pero aunque rujan como las olas grandes de la playa, Dios los hará callar y huirán como la paja que esparce el viento, como los arbustos que ruedan antes de una tormenta.


En la noche, Israel espera aterrado; pero al amanecer, sus enemigos están muertos. Esta es la justa recompensa para quienes nos saquean, un final apropiado para quienes nos destruyen.


តាម​ពួក​យើង:

ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម


ការផ្សាយពាណិជ្ជកម្ម